El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), la Agencia de la ONU para los Refugiados, y la Unión Europea anunciaron este martes el lanzamiento de una nueva iniciativa para fortalecer los sistemas de protección infantil y brindar alternativas a la detención migratoria de los niños en Centroamérica, México y África del Sur.
Durante el transcurso del programa de 30 meses y con un presupuesto de 7,5 millones de euros, las agencias de la ONU trabajarán junto a los gobiernos nacionales; autoridades locales con carteras de protección infantil y bienestar social y asuntos de interior y justicia; organizaciones de la sociedad civil y otras partes interesadas en torno a tres objetivos clave para la infancia.
El programa garantizará la mejora de la capacidad de los sistemas de protección infantil para incluir servicios sensibles al género y opciones de cuidado alternativo a la detención de inmigrantes. También trabajará para incrementar la capacidad de los actores de primera línea para identificar a los niños en movimiento que sufren o corren el riesgo de sufrir violencia de género y para enviarlos a cuidados alternativos apropiados en la familia y la comunidad. La iniciativa además busca que las lecciones aprendidas y las mejores prácticas respecto a los niños migrantes, refugiados y solicitantes de asilo se documenten y compartan para contribuir a fortalecer la cooperación mundial.
“Los niños siempre deben ser tratados ante todo como niños, independientemente de su situación migratoria. Tienen derecho a estar protegidos y a vivir en un entorno seguro. Esto incluye tener acceso a educación, atención médica y saneamiento, servicios sociales y legales, y apoyo psicológico. En con las dos agencias de la ONU, la Unión Europea se está acercando especialmente a los niños afectados por la detención de inmigrantes”, expresó Jutta Urpilainen, comisaria europea para las asociaciones internacionales.