POR SEBASTIÁN SAAVEDRA
Natasha Steinberg trabaja desde hace 14 años en la gestión pública. Se desempeñó como Asesora de Gabinete de la Dirección General de Relaciones Institucionales (2008 – 2011) y Asesora del Gabinete de la Subsecretaría de Derechos Humanos y Pluralismo Cultural (2011 – 2015) de la Ciudad de Buenos Aires.
Entre los años 2016 y 2019 ocupó el cargo de Jefa de Gabinete de la Subsecretaría de Derechos Humanos y Pluralismo Cultural del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y desde diciembre de 2019 es Directora General de Convivencia en la Diversidad de la Subsecretaría de Derechos Humanos del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
“Tenemos como misión desarrollar políticas públicas de promoción, prevención y protección para la no discriminación, la igualdad de derechos, el diálogo y la diversidad. Trabajamos activa y comprometidamente en la visibilización de los derechos del colectivo LGBTIQ+ para la construcción de una sociedad porteña más justa y equitativa”, detalla Natasha.
En este diálogo con Optimism, nos cuenta su percepción sobre el desarrollo de las políticas inclusivas en Argentina, la diversidad en nuestra sociedad y los derechos conseguidos y por adquirir.
-¿Cómo se llega a ser la directora de Diversidad de la Secretaría de Derechos Humsnos?
Hace 14 años que trabajo en el Gobierno de la Ciudad. Ingresé colaborando en una investigación sobre el aporte de las colectividades en la Ciudad de Buenos Aires. Así fui tomando distintos proyectos, hasta que en 2016 pase a ser Jefa de Gabinete de la Subsecretaría de Derechos Humanos, ya en diciembre de 2019 me dieron a cargo la Dirección General de Convivencia en la Diversidad. Toda una carrera que tiene que ver con migrantes, refugiados, pluralismo cultural y otras temáticas.
-¿Cual es el rol que cumple la Secretaría?
Tiene la finalidad de la promoción y protección de derechos de distintos colectivos minoritarios, colectividades, poblaciones migrantes y refugiados. El colectivo LGTBQ de diversidad sexual, también el Parque de la Memoria con el reconocimiento a la historia y las temáticas vinculadas al terrorismo de Estado. Por último, no quiero dejar de mencionar a la Dirección de Familia donde se abordan temáticas como la trata de personas y derecho a la identidad.
-¿Qué sensaciones te quedaron de la marcha LGBT de este año?
De la marcha me quedo que afortunadamente son cada día más las personas que se acercan y vienen de todo el país a participar. Por otro lado, veo cada vez más que la sociedad decide acompañar incluso sin ser parte del colectivo, y por eso se ven marchas multitudinarias como la del otro día donde se calcula que hubo 800 mil personas. Esto sería imposible sin la articulación del Estado nacional, de la Ciudad, y organizaciones civiles para que todo salga bien entre las personas asistentes. Con tanto caudal de gente es importantísimo que todo salga bien en términos de seguridad, estamos mejor año a año.
-¿Cómo viene el desarrollo de políticas inclusivas en Argentina?
Hay un montón de vanguardia en comparación con países de la región y el mundo. Pero nos falta un cambio cultural y grande en ámbitos de la sociedad donde las personas del colectivo padecen exclusión y muchísima desventaja en términos de acceso a derechos. La Ciudad de Buenos Aires es una ciudad que no es representativa de lo que pasa en todo el país, y tenemos que seguir trabajando por eso. La política de derechos tiene que estar en todos lados, y que todas las provincias y municipios sean un espacio seguro.
-¿En qué nos falta mejorar como sociedad en cuanto a la inclusión?
Nos falta mejorar y conocer cuáles son las condiciones de las consecuencias en la gente del colectivo de tantos años de falta de acceso al sistema y oportunidades que cualqueir persona. Hay poco entendimiento sobre la necesidad de hacer una discriminación positiva en pos de igualar las oportunidades. A medida que se va avanzando en término de políticas públicas e inclusivas, también hay un retroceso en algunos rincones de la sociedad que toman reacciones más violentas en contra de lo que son estos avances en pos de los derechos de las personas.
-¿Querés agregar algo más?
La marcha fue una conclusión linda y un buen cierre de lo que fue la Semana del Orgullo de celebración con distintos eventos y actividades para los vecinos de la Ciudad, y que afortunadamente se siguen sumando empresas, organizaciones y gente del Interior. Tenemos todavía un gran desafío que es la inclusión laboral de las personas trans, que es la prioridad que tenemos a la hora de pensar en el trabajo y las políticas de dirección general de convivencia de la diversidad. El trabajo es la única herramienta posible para una inserción real y verdadera.
