Considerada líder amazónica por ganarle 200.000 hectáreas a una petrolera
Nemonte Nenquimo, o Nemo como la llaman sus allegados, es una indígena waorani ecuatoriana que fue galardonada el 30 de noviembre con el Premio Goldman, o “Nobel Ambiental”, otorgado cada año a líderes ambientales mundiales.
Considerada líder en su territorio, es activista por los derechos indígenas, fundadora de la organización Alianza Ceibo y representante del consejo de su comunidad. Ya fue noticia hace poco por ser una de las 100 personas más influyentes del 2020 en la revista Time y, junto con este premio, llegó a la cúspide del reconocimiento mundial como una de las más grandes defensoras de la Amazonia.
La lucha que la llevó a este reconocimiento comenzó en 2012, cuando el gobierno ecuatoriano pretendió conseguir la autorización de familias indígenas de la región de Pastaza para la exploración y explotación de un campo de petróleo conocido como el Bloque 22, un espacio de más de 200 mil hectáreas de selva que se conecta en un 16% con territorios de las 16 comunidades indígenas.
Luego de seguir el caso, Nemonte descubrió que quienes hablaron con las familias lo hicieron en español y no en su lengua nativa, por lo cual se vio muy limitado el entendimiento, lo que favoreció el consentimiento de las familias. Otros líderes indígenas se sumaron a la causa, y junto a Nemo iniciaron acciones legales por el incumplimiento a su derecho de la consulta previa y en respuesta a un procedimiento que se realizó sin los protocolos reglamentados por la ley.
Ocho años duró la lucha contra las petroleras, enfatizando en la importancia ecológica y ancestral de esas tierras. que finalmente culminó en julio de 2019, cuando la Corte Provincial de Pastaza determinó que el suceso del 2012 no cumplió con los estándares nacionales e internacionales frente a los pueblos originarios, lo que terminó por prohibirles a las empresas la explotación petrolera.
