El el marco del Día Internacional del Cáncer Infatil la historia de “Pajaritos Volando”, los voluntarios detrás de los murales mendocinos que unen a las familias que transitan esta enfermedad con el arte como medio de expresión.
Cada 15 de febrero se conmemora a nivel mundial el Día Internacional del Cáncer Infantil. Desde el 2015 un proyecto mendocino inaugura, una vez por año, en esta fecha, coloridos murales colocados en los diferentes departamentos de la provincia. Se trata de “Pajaritos Volando”, un proyecto que trabaja con los niños y niñas que pasan por la sala de espera del servicio Oncología y Hematología del Hospital Notti y tiene como objetivo promover la concientización sobre esta enfermedad.
Pajaritos Volando nació en el años 2015 y desde ahí se ha dedicado a trabajar con los niños y niñas que pasan por la sala de espera del servicio de Oncología y Hematología del Hospital Notti, pero de una manera diferente.
Usando el arte como puente y medio de expresión, la iniciativa nació cuando decidieron llevar la hora del cuento, en el Hospital Notti, a otro nivel. “La idea era distraer un poco a los niños y niñas de la Isla 2 de hematología oncológica. Ahí nos dimos cuenta que no había muchas ganas de escuchar solamente los cuentos, entonces propusimos otra actividad. Ahí trajimos la técnica de mosaico”, contó a la artista plástica Luisa Olguín, encargada del grupo de voluntarios que pone las manos a la obra.
LA HISTORIA DE PAJARITOS VOLANDO Y SU LUCHA CONTRA EL CÁNCER INFANTIL
El nombre de la propuesta, Pajaritos Volando, proviene de la asociación con el hornero, que se caracteriza por hacer su casa, por el cuidado de su familia y su relación a lo hogareño. “Por esta razón diseñe la silueta de un pájaro, para que los chicos pudieran intervenirlo mientras esperaban el turno a su consulta médica o quimioterapia” reflexionó Olguín.
El trabajo siempre se realizó a través de los voluntarios que día tras día concurren a las bibliotecas departamentales a aprender la técnica del mosaico. Fue así como la comunidad fue creciendo en cada localidad de la provincia.
“Cuando lo intente por primera vez, quise poner esos pajaritos en el Hospital Notti, pero no nos dieron permiso. En ese momento, el Jefe del servicio de Hematología ontológica me dijo que era hora de sacar el hospital afuera, a la comunidad en la que los niños viven”.
El proyecto aún sigue creciendo y planea hacerlo por 10 años más. “Cada vez que terminó de inaugurar un mural, siempre algún familiar o niño me pide que visite su departamento. Ese es uno de nuestros objetivos: recorrer toda Mendoza. Nos estarían quedando 10 departamentos, es decir 10 años más”, relató sobre la continuación de Pajaritos Volando.
El primer mural se inició en Luján de Cuyo y esta ubicado en la rotonda de los bomberos en la calles Roque Saénz Peña y Chile. Es uno de los más grandes ya que abarca casi toda una cuadra. Después le continúo Junín, Godoy Cruz, General Alvear, Las Heras, San Martín, Rivadavia y el último inaugurado hoy en Santa Rosa.
“Creo que con el arte, en ese caso, queremos ser un puente entre el hospital, el Ministerio de Salud y en especial los departamentos de Mendoza. Que cada intendente pueda visualizar la problemática que sufren y padecen las familias con estas enfermedad, cuando a veces se quedan sin trabajo y padecen de muchas necesidades”, contó la encargada del proyecto.
“Lo único que hacemos es tener las herramientas del arte para visualizar una enfermedad en los niños”, recalcó Olguín y apuntó a que el proyecto seguirá funcionando por lo menos durante 10 años más, cuando logren inaugurar, cada 15 de febrero, un mural en cada uno de los 10 departamentos que aún le faltan.
EL CÁNCER INFANTIL, LA SITUACIÓN EN EL HOSPITAL NOTTI
Entre los tipos de cáncer más comunes que suelen presentar las infancias y adolescencias, las leucemias representan 40% del cáncer infantil. Sin embargo, con el tratamiento adecuado, quienes padecen esta patología han aumentado sus posibilidades de sobrevivir alcanzando entre un 80% o 90% de curación, lo cual resulta un dato esperanzador para transitar el proceso.
Aunque el cáncer pediátrico no es prevenible, un diagnóstico y tratamiento temprano son claves para mejorar las posibilidades de supervivencia. Es crucial siempre prestar atención a signos o síntomas de malestar anormal que persistan en niños, niñas y adolescentes.
El médico Guillermo Arbesú, jefe de Hematología del Hospital Notti, expresó que “los niños con leucemia reciben un tratamiento de quimioterapia que dura dos años. Posteriormente, controlada la enfermedad, siguen los controles sin recibir quimioterapia hasta cumplir los cinco años desde el diagnóstico. Ese día se les da el alta, ya que las probabilidades de volver a una leucemia son cercanas a cero, y pasan a controles anuales de paciente curado”.
FUENTE: VIA PAIS