El actor contó qué fue lo que le sucedió y cómo logró sobreponerse. “Aposté por vivir. No había otra opción. No había vuelta atrás”, dijo.
A mediados de 2020 el actor mexicano Juan Pablo Medina, quien interpretó a Diego en la serie furor “La Casa de las Flores”, que protagonizaba Verónica Castro, sufrió un infarto silencioso. Mientras estaba trabajando comenzó a sentirse mal y pidió por un médico, lo llevaron al Hospital Ángeles y en un principio los médicos pensaron que se trataba de una intoxicación.
Entre tres y cuatro días después, tras una serie de análisis, vieron que tenía coágulos en el intestino y en las piernas.
Según le informaron tuvo un infarto silencioso, tenía un coágulo en el corazón y éste aventó coágulos por todas las arterias. “Yo tenía mucho dolor y para poderme operar el intestino y las piernas me tuvieron que dormir. Cuando desperté, me vi todo hinchado, mis manos parecían enormes bolas. Todo fue muy traumático”, relató en una entrevista.
Cuando despertó estuvo más de un mes sin poder mover los brazos, por lo que lo volvieron a operar porque tenía más coágulos en las piernas.
“Después de una cirugía para extraerme los coágulos, mi cuerpo empezó a no responder del todo bien. Mi papá me dijo que el hematólogo quería hablar conmigo y me adelantó lo que me iba a decir. Habían prometido rescatarme de los coágulos sin poner en riesgo mi vida, pero que ya me encontraba en una situación grave. Me ofrecían salvarme la vida, pero la solución era la amputación. Y cuanto más tiempo pasara, las cosas se tornarían más y más complicadas, por lo que había llegado el momento de tomar una decisión. Yo aposté por vivir. Reuní a mi familia y les transmití que aceptaba. Todos me apoyaron. No había otra opción. No había vuelta atrás”, reveló.
“Cuando se tomó la decisión de la amputación, a las dos horas entró una persona en mi habitación y se presentó. Era un psiquiatra. Empezamos a hablar de la decisión desde antes de que se hiciera la intervención médica y eso hizo toda la diferencia”, agregó.
“Cuando me dijeron que me iban a amputar, lo primero que me vino a la mente es que mi vida, como la llevaba, se había terminado”, confesó y apuntó: “Es ahí cuando te preguntás qué vas a hacer y cómo será el cambio. Lo que yo quería era simplemente vivir y a partir de ahí empecé a pensar de manera positiva”.
En las últimas semanas, se lo vio por primera vez con su prótesis y asegura que todavía le queda un largo camino de rehabilitación. “Mi recuperación va muy bien. Yo pensé que en chinga caminaría con la prótesis, pero no es así. Estoy aprendiendo. A veces el muñón duele, pero ahí vamos”, señaló.
“Este proceso es algo muy personal, por lo que antes que todo tengo que tener muy claro lo que me sucedió para poder seguir trabajando. Hasta creí que ya no iba a trabajar más como actor, que mi carrera había terminado. Por eso no me quiero adelantar y sé que debo atravesar todos los procesos. Por ahora, lo más importante es la salud mental y sanarme, poder dominar la prótesis y continuar con la recuperación física; para después llegar a poder interpretar los personajes que me lleguen en el futuro”, concluyó.
Medina ha participado de La Casa de las Flores, Soy tu fan, Guerra de ídolos, Sin rastro de ti y Las Juanas. Uno de sus últimos trabajos es Amarres, que se puede ver por la plataforma HBO Max.