El patinaje artístico es una disciplina deportiva donde los atletas realizan acrobacias, piruetas y otros ejercicios técnicos utilizando patines sobre ruedas. Este deporte permite competir en diversas categorías, entre las que se encuentran figuras obligatorias/escuela, patinaje libre, danza obligatoria, parejas, danza libre, precisión, show e inline.
Ahora bien, ¿cómo surgió esta disciplina disfrutada hoy por tanta gente? Luego de que el neerlandés Hoans Brinker implementara en una fiesta los patines de ruedas en 1733, el belga Joseph Merlin creó unos patines incorporando cuatro ruedas dispuestas en una sola línea en 1770. En 1789, Lodewijik Maximilian Van Lede introdujo el patín en línea en Francia, donde fue llamado patin a terre. Estos patines consistían en una placa de metal con ruedas de madera. En 1819, se estableció la primera patente comercial del patín en línea con tres ruedas. De esa misma época se tienen noticias de la primera representación, el ballet Der Maler oder die Wintervergnügen («El pintor o los placeres invernales»), en la que aparecían patinadores sobre ruedas simulando el patinaje sobre hielo.
El primer patín de tipo quad, con dos ruedas a cada lado como lo conocemos hoy, fue inventado por el estadounidense James Plimpton en 1863. Hacia el final del siglo XX fue cuando se inventaron los primeros patines in-line apropiados para el patinaje artístico.
En abril de 1924 se fundó la Federation Internationale de Roller Skating (FIRS). La FIRS está reconocida por el Comité Olímpico Internacional como la representante de todas las disciplinas de patinaje sobre ruedas, un primer paso necesario para que se acepte este deporte en los Juegos Olímpicos En 2002 tuvieron lugar los primeros campeonatos de patinaje artístico en la modalidad en línea.
En nuestro país, la Confederación Argentina de Patinaje, presidida por Daniel Ventura, es la encargada de regular la disciplina. -Nació un 19 de abril de 1956 en Buenos Aires, Argentina, ante la necesidad de tener un ente que agrupe a todos los deportes de patinaje sobre ruedas del país, para así poder darles un marco legal e identidad internacional.
Actualmente, la CAP cuenta con 9 deportes a nivel nacional: Patinaje Artístico, Patinaje de Velocidad, Skateboarding, Hockey Sobre Patines, Hockey Inline, Roller Freestyle, Downhill, Aggressive y Roller Derby.
El patinaje artístico no solo requiere una buena preparación física y una gran capacidad de concentración, si no también de mucha pasión y corazón. Así lo demostró Giselle Soler al ganar el Campeonato Mundial de Patinaje en Asunción, Paraguay el jueves 30 de septiembre.
“SOY CAMPEONA DEL MUNDO. Me explota el corazón. En el peor momento de mi vida llegó el mejor momento de mi vida. No lo puedo creer, tanto trabajamos para esto, tantos años, y lo logramos. Gracias”, escribió en su cuenta de Instagram junto con fotos alusivas al momento de la competición y la premiación. Además, vía Twitter, Giselle hizo un pedido muy especial para todo aquel que la lea y la retuiteé: “Para quienes no saben, me llamo Giselle Soler y me consagré campeona del mundo hace unos días. Quisiera aprovechar esta oportunidad para decirles que busco sponsor ya que me serian de mucha ayuda en mi carrera deportiva. Cada retweet suma muchísimo para difundir. Muchas gracias”.
Siendo parte del seleccionado nacional, Giselle no hizo más que sumar triunfos a su carrera. Entre las múltiples medallas, se destaca la de oro que ganó en los juegos Panamericanos del 2015. Por aquel entonces, conocíamos una Giselle de 18 años que incursionó en el patinaje por seguir a su hermana Elizabeth.
Mucho antes, de llegar a Toronto, fue campeona mundial Junior en China 2013, y al año siguiente se subió a lo más alto del podio en los Juegos Odesur de Chile luego de desplazar a su hermana mayor en la clasificación para estos Juegos.
“El secreto es la cabeza y mucho entrenamiento. Pero la cabeza es clave para no estar nerviosa o para poder ocultar que lo estás” contaba a La Voz, añadiendo que su hermana fue siempre su guía en cada competición. “Me dijo que disfrute mucho, que esté tranquila, que no era un torneo más. Me dijo que me tenían que ver linda, y no sólo los jueces… Me dijo tantas cosas. Yo toda la vida admiré a mi hermana”, comentó en aquel entonces.
Hoy, con 24 años, Giselle es campeona mundial y va por mucho más para difundir e invitar a más personas a sumarse a este hermoso deporte.
