Es argentino, vive en Zambia y comenzó una iniciativa solidaria

Un joven argentino que se instaló en Zambia hace dos meses impulsó una iniciativa en Twitter para ayudar al club donde trabaja y a la comunidad de su barrio. En la plataforma, inició el proyecto de hacer una serie de reformas a la cancha donde el New Hope Waves FC, de la tercera división del país africano, juega como local. Junto con las mejoras, que más allá del equipo, ayudarán a decenas de chicos, decidió rebautizar el espacio como “Diego Armando Maradona Ground”.

Martín Shatal tiene 18 años y en marzo ya logró una gran repercusión en Twitter con el armado de su cuenta “Argentino en Zambia”. Oriundo de Flores, en la Ciudad de Buenos Aires, buscó trabajar para una ONG y el destino lo depositó en Zambia. Gracias a su formación con Diego Dabove, consiguió que el encargado de New Hopes Waves, la organización que lo llevó a trabajar allí, lo invite a formar parte del club homónimo que administra.

Así fue como el argentino comenzó a formar parte del cuerpo técnico del New Hope Waves FC, club que compite en la FAZ Division Three Southern A, nomenclatura de la tercera división del país africano. En una entrevista con este medio, contó su historia y cómo llegó hasta dónde está hoy.

A dos meses de su arribo a África, se involucró no solo con el club, sino también con la vida y la comunidad de Maramba, el barrio donde está ubicada la cancha. “Me fui encariñando con el club, los chicos de la sub-12 y la sub-10 y los chicos de Maramba. Es un barrio vulnerable, de muy bajos recursos y los chicos están todo el día jugando en nuestra cancha”, comenzó a explicar Martín, que remarcó la importancia social que tiene el club y el espacio para que jueguen al fútbol. “Se la pasan ahí, yo cada tanto voy y juego con ellos. La verdad formamos una muy linda relación”, agregó.

El cambio de nombre al estadio como una fuente de inspiración

Dentro de su vínculo y diálogo con los chicos zambianos, Martín les contó la historia de Diego Armando Maradona y tomó su figura como motivación. “Diego es una inspiración para todos los chicos. Les he contado que salió de Villa Fiorito, cómo iba a los entrenamientos. Claramente se sienten identificados”, expresó.

Por ese motivo, consideró que la cancha del Waves, actualmente nombrada como “Campo de entrenamiento de la juventud”, debería llevar su nombre. En un principio, había querido ponerle “Malvinas Islands Ground”, lo cual se traduciría como “Campo Islas Malvinas”. Esto se enmarcó en una intención suya de “fomentar el anticolonialismo”, ya que Zambia fue colonia británica hasta el 24 de octubre de 1967, cuando firmó su independencia. Sin embargo, el municipio de Livingstone, donde está ubicado el club, no habilitó esta modificación.

Ante la negativa, la siguiente propuesta fue ponerle el nombre de Diego, idea que sí fue aceptada por la ciudad. Aunque el cambio podría hacerse de forma inmediata, el argentino quiere esperar a tener listas una serie de reformas para concretarlo.

Las mejoras que quiere impulsar en la cancha

La idea salió de una charla de Martín con Jackson Siamaingi, el director técnico del New Hope Waves FC. El entrenador pregona una idea de juego con muchos pases y salidas con pelota dominada. Por ese motivo, el mal estado del campo del juego los perjudica: “Siempre hablamos que es difícil jugar bien en una cancha de este estilo cuando somos locales. Dijimos que deberíamos mejorarla”.

Los problemas principales pasan por la ausencia de césped y el desnivel de la cancha. A pesar de que no es una realidad alejada del resto de los equipos del torneo, el argentino aseguró que incluso están en desventaja con sus competidores: “Es hasta malo para clubes de la categoría. Somos unos de los clubes con menos recursos económicos”.

Detrás de esto, hay una razón que separa al Waves del resto de los equipos. “Tenemos una ONG muy chica y no un dueño. Somos de los pocos clubes sin dueño y con presidente. No se maneja con fines de lucro”, explicó sobre la organización que administra Auldridge Chibbwalu, presidente del club y la ONG que “saca chicos del barrio, les da clases gratis y los desarrolla”.

Con el objetivo de mejorar esta realidad, Martín comenzó la búsqueda y consiguió una empresa que se encargará de hacerlo realidad: “Llegué a una constructora que me pasó el costo de una serie de reformas: cambiar el césped, poner buen fertilizante y tierra, cambiar los postes y colocar buenos arcos”.

Para financiar esto, inició una colecta de donaciones en su cuenta @Martecoll, donde pide a sus seguidores una suma en pesos para hacerlo posible.

Cómo donar en la colecta para las mejoras del Diego Armando Maradona Ground

El objetivo es llegar a 972.400 pesos, que al valor del dólar blue de este jueves se traducen en unos 2068 dólares. Con los más de 16.700 usuarios que tiene en Twitter, hizo un cálculo muy simple que le permitiría llegar al objetivo: “Si el 20 por ciento de mis seguidores aporta $300 cada uno, llegamos. Creo que es algo posible”.

Para hacer transparente el proceso, Martín también puso a disposición una planilla de Google Sheets en la que especificó los costos de cada uno de los ítems que presupuestó MacroWorld Construction LTD, empresa encargada de las reformas. El argentino aclaró que no se queda con ningún porcentaje del dinero enviado y que todo está destinado a cubrir los costos de la operación. Quienes quieran donar pueden hacerlo al CVU 0000003100058672696937 o alias CespedZambia de la cuenta de Mercado Pago.

Como incentivo, quienes donen serán reconocidos en la entrada del estadio. Además de lo ya mencionado, se incluirá un cartel de bienvenida al Diego Armando Maradona Ground con todos los nombres de quienes hayan aportado a la causa.

La colecta comenzó durante la tarde del miércoles y en sus primeras 12 horas logró recolectar el dinero requerido. Ante el apoyo que recibió, el argentino aclaró que el excedente de lo que logre juntar con la colecta irá para comprar un micro que facilite el traslado del Waves en sus partidos como visitante.

“La cancha no es únicamente para el club. El club entrena todos los días y juega una semana por medio ahí, pero más que el club, juegan nenes todos los días ¿Qué mejor manera que hacerlo teniendo un buen campo de juego? Es una inversión que les puede venir muy bien a los chicos”, cerró Martín.

FUENTE LA NACIÓN