Una nueva terapia de luz infrarroja que toma sólo unos minutos cada día podría ayudar a pacientes con demencia y otros trastornos cerebrales a mejorar su memoria y movimiento.
Un nuevo tratamiento experimental con luz infrarroja, creado por científicos de la Universidad de Durham, en el Reino Unido, podría mejorar la memoria y el movimiento, en pacientes con demencia, Parkinson u otros trastornos cerebrales.
La iniciativa
Junto a un grupo de ingenieros de BSc Engineering desarrollaron un casco que estimula el flujo sanguíneo en el cerebro, abriendo los vasos para que más oxígeno pueda llegar a la materia blanca. De este modo, se mejora la memoria, la función motora y las habilidades de procesamiento. Cada casco cuesta algo más de 10 mil dólares, pero los pacientes podrán realizar el tratamiento en su casa.
Los científicos realizaron pruebas de habilidades verbales, de memoria y motoras en los participantes antes y después de la terapia. El casco funciona enviando luz infrarroja desde 14 matrices de luces LED enfriadas por ventilador, dirigiéndolas al interior del cerebro a una longitud de onda de entre 1.060 y 1.080 nanómetros y entrega 1.368 julios de energía al cráneo durante cada ciclo de tratamiento. Esto es lo que permite a generar mayor energía química a las células y aumenta el nivel de trisfofatos, que desciende en los pacientes con demencia.