Con un pequeño y tierno gesto, esta maestra de jardín enseña respeto e inclusión

Diversidad Slider costado

La docente asegura que el ritual al comienzo de la clase “es la parte favorita del día” de sus estudiantes.

Un gesto común, un saludo estandarizado, un ritual sencillo, una forma de cambiar el mundo. O al menos así lo ve Ashley Taylor, una maestra jardinera de Texas, Estados Unidos, que decidió instaurar el apretón de manos en su salón de clases. Todos los días, un niño es elegido como el “saludador”, el encargado de darle la bienvenida al aula a sus compañeros. Así, se para delante de la puerta y uno a uno estrecha las manos de sus compañeros y compañeras, al tiempo que dice sus nombres.

A cada chico se lo llama por el nombre, se le da un firme apretón de manos y se lo invita a pasar con una sonrisa y, a veces, con un abrazo”, asegura la docente, al tiempo que agrega que todos los chicos “ruegan” ser saludadores.

Sin embargo, su método de elección es particular: Taylor habla con cada uno de sus 18 estudiantes para saber cómo comenzaron su día. “Eso me da una idea de a quién debería elegir”, indicó.

El video mencionado tiene un doble propósito. Por un lado, Taylor quiso mostrar el significativo ritual de sus “pequeños”, como los llama. Pero por otro, decidió que el “saludador” de ese día fuese Asher, un niño con neurofibromatosis tipo 1, un trastorno genético que provoca que se formen tumores en los tejidos del sistema nervioso. Si bien suelen ser benignos, puede tener complicaciones como pérdida de audición y visión, deterioro del aprendizaje, problemas cardíacos y dolor intenso, de acuerdo a la Clínica Mayo.

 “Cuando comenzó el año escolar su habla era limitada, y las pocas palabras que decía no eran claras. Así que, cuando grabé el video estaba muy orgullosa de lo lejos que ha llegado. Fue capaz de comunicarse de forma clara con cada estudiante, saludándolos por su nombre”, aseguró Taylor.

Siempre me pregunté cómo iba a hacer un cambio en el mundo. Esto me demostró que puedo hacer la diferencia con algo tan simple como esto”, afirmó a medios estadounidenses. “A lo largo de cada día, nuestras actividades requieren que hablemos y escuchemos, y para esto es preciso el respeto y el contacto visual”, detalló la docente. En este sentido, señaló que sus alumnos “son muy distintos a sus pares, algo que se ve en la forma en la que interactúan con otros chicos y adultos”. “Creo que el apretón de manos diario es su parte favorita del día. La vida puede ser difícil para los niños, pero no debería serlo en la escuela”, concluyó. 

Suscribite
Notificarme de
guest
0 Comentario
Ver todos los comentarios