Chau, me voy a dar una vueltita hasta Alaska

POR FERNANDA DI BENEDETTO

¿Mover las piernas muchísimos kilómetros? ¿Ser seguido por personas en el camino? ¿Llamar tanto la atención que los medios quieren escribir sobre vos? No, esta vez no estamos hablando de Forrest Gump, si no de Martín “Kuky” Echegaray Davies, más conocido como “el caminante de las tres américas”.

Chubutense oriundo de Trelew, emprendió una de las aventuras más emblemáticas de nuestro país. Tiene 62 años, está casado, con tres hijas y seis nietos, todos declarados fanáticos de la caminata de Kuky. Antes de encarar este desafío, se dedicaba a ser jagüelero, haciendo pozos y alambrados, y arreglando molinos. 

En su blogspot, se define como “un caminante solitario que intenta lograr un Rally, uniendo Bahía Lapataia, Tierra del fuego, Argentina con Deadhorse, (Caballo Muerto), Alaska, USA.”, haciendo referencia a la caminata que inició hace tres años.

El 31 de octubre del 2017, Kuky, como lo llaman afectuosamente, salió desde Ushuaia con el objetivo de llegar en octubre del 2020 a Alaska, pasando primeramente por las capitales de todas las provincias argentinas. ”Salí donde se termina la rutas 3 en el Km 3079, el 31/10/2017, y en 3 años pienso completarlo” comenta.

No es la primera vez que Kuky realiza una travesía a pie. En el mismo blogspot, cuenta que comenzó a “hacer caminatas con descendientes de galeses de Madryn a Rawson buscando el río por agua dulce”, realizando luego la caminata “Tras las huellas de Fontana y sus Rifleros” dentro de la provincia del Chubut, con un total de 2.152 kilómetros recorridos. Así, fue como surgió en su cabeza la idea de unir las tres américas, partiendo desde el fin del mundo en el sur de Argentina, con destino al fin del mundo en el norte de Alaska.

En su página de Facebook, que colectó miles de seguidores, plasmó la bitácora diaria de la caminata. Subió centenares de fotos y videos de los lugares que recorrió y personas que conoció en el camino.

“La idea surgió después de haber hecho varias caminatas dentro de la provincia del Chubut, quería hacer algo más trascendental”, comenta Kuky al preguntarle sobre qué lo motivó a realizar esta hazaña. Además, agregó que lo que lo llevó a elegir unir las tres américas fue la practicidad por el idioma. “Toda América es latina, se habla español, y el único lugar donde podía tener ese problema era en norteamérica”.

En el carrito que lo acompañó durante todo el trayecto, que duró hasta el 7 de septiembre de este año cuando, por el coronavirus, fue repatriado a la Argentina, llevaba todo el equipo necesario para sobrellevar el viaje. “Ropa, comida, para hacer la comida, carpa, todo mi campamento”, aclara.

A pesar de haberse terminado un mes antes de lo planeado, caminó un total de 22.850 kilómetros, faltando alrededor de 5000 para llegar al destino que se había propuesto. Más allá del abrupto fin del viaje, comenta que no cree que vaya a retomar: “sería algo muy casual si lo llego a retomar, porque yo tenía un deseo y lo cumplí, que era caminar mucho, y fue suficiente caminar por dos años”.

Sobre las dificultades que afrontó, cuenta que lo más complicado fueron las subidas y bajadas de montañas “principalmente en Colombia, donde me tocaron tres cordilleras”. Además, algunas roturas que sufrió el carro, daños en sus pies que lo llevaron al hospital en una oportunidad, y desgaste de calzado, también fueron parte de las trabas en el recorrido.

Para cerrar, hablamos de lo lindo que se llevó de esta aventura: “Cada vez que iba me encontraba con personas que me estaban apoyando, y esas son sorpresas que me llevé” comenta entusiasmado, y dice que no podría elegir un top diez de lugares que más le gustaron, porque todos tuvieron algo que le llamó la atención. “Todos los paisajes son hermosos, los desiertos de Perú, son lindos, toda la selva de Colombia, la nieve en Estados Unidos”, por mencionar sólo algunos.