La voz de la superación

Carlos Fernández tuvo un ACV pero no fue obstáculo para crear su programa de radio ‘Bienestar y Otras Yerbas’

POR ALEXANDRA BARRETO

Un 7 de agosto del 2016, Carlos Fernández estaba recostado en el sofá de su casa viendo la televisión mientras hacía   tiempo para salir hacia la localidad de Lomas de Zamora a jugar un amistoso de handball con el equipo en el que jugaba, el Club Defensa y Justicia. Por ese entonces tenía 49 años y era uno de los arqueros titulares del equipo “B”, pero un hecho súbito cambió su vida.

“Comencé  a sentirme mal, la visión se me puso borrosa, pedí ayuda al resto de la familia que estaba cada uno en distintas actividades. Manifesté indicios de un accidente cerebro vascular (ACV) en cuestión de minutos. Mientras llamaban a la ambulancia no se entendía lo que quería decir, perdí la movilidad del lado derecho de todo el cuerpo”, revive el locutor.

Es comunicador. Nació en Bernal, tiene 5 hijos entre 31 y 5 años de edad. Además, estudió locución en el ISER.

“En marzo cumplo 55 el años, pero mi renacer fue el 8 de agosto, ese día salí del coma y tomé conciencia. Festejaré ésta fecha hasta el último día”, sostiene.

Después de atravesar los primeros veinte días de internación entre terapia intensiva y sala común, lo trasladaron a su residencia. Alquilaron una cama ortopédica, la cual colocaron en el comedor de la planta baja de la casa (las habitaciones estaban en la planta alta). Así comenzaron cada uno de los cambios para él y su familia.

Al cabo de varios meses de rehabilitación, una de las características que llamaba la atención a los distintos profesionales que lo atendían, era que Carlos solía estar de buen humor y conversaba bastante.

“Los doctores me dijeron que de cada diez pacientes con ACV nueve se deprimen. Por lo que me contaron parece que pertenecía a ese ‘uno de cada diez’ que no lo hacía. Comenzaron a alentarme para que ayude a los demás internados del centro de rehabilitación al que fui y sigo yendo. Después de casi un año de fonoaudiología y una recuperación de un 90% de mi habla, decidí encarar un programa radial que llegara a personas que necesiten información para tratar sus enfermedades o de algún familiar”.

La primera versión del ciclo radial se llamó ‘De Salud y otras Yerbas’ que se inició en abril de 2018 en FM Ayres 96.5, una radio cooperativa de Florencio Varela.

En marzo del 2020, el programa comenzó a salir al aire de lunes a viernes de 11 a 12h y los sábados de 8 a 10.

“Desde el inicio y hasta gran parte del 2019 me acompañó en la co-conducción, Karla Miranda, en la actualidad es una de las columnistas que forman parte del equipo del programa de producción independiente. El nombre se modificó tras la sugerencia del coordinador general del Grupo AgenHoy FM y Portal de Noticias Digital, Roberto Zarlenga, siempre está apoyando y aportando ideas para mejorar”.

‘Bienestar y Otras Yerbas’ está conformado por columnistas y colaboradores que enriquecen al programa día a día, que tiene una alcance nacional e internacional, con oyentes de Perú, República Dominicana y Guatemala.

“Las entrevistas que se escuchan en las emisiones abordan temas como respiradores manuales, cómo nos ayudan las flores de bach, pacientes de lupus que no consiguen medicamentos en pandemia, dengue en Florencio Varela, bloqueos y creencias limitantes”, relata. A su vez, cuenta que hay entrevistados de Estados Unidos, España, Japón, Uruguay, y Brasil, entre otros países.

La vida de Carlos permanece en constante movimiento, siempre con ganas de avanzar y dar lo mejor en su espacio. ‘Bienestar y Otras Yerbas’, como dice su nombre, proporciona ese estado de mejoría en la salud emocional y física.

“Abrazamos la igualdad como un derecho a ser diferentes. Entre los temas principales que abordamos en nuestro podcast son salud, movilidad reducida, discapacidad, testimonios inspiradores, entre otros”, destacó.

UNA VIDA PLENA

¿Cómo te sientes de haber logrado tantas cosas en tu vida?

Orgulloso, logré ser independiente,  vivo solo y no tengo que depender de alguien para bañarme, cocinar, limpiar mi vivienda, hacer los mandados. También tengo a mi hermano cuando necesito a hacer una gran refacción.  Tengo el lado derecho de mi cuerpo adormecido y mi terapia física es la que me ayuda a salir adelante. Logré varias metas, publiqué en mi Facebook cómo abrir una lata de arvejas, atarme las zapatillas con cordones con una sola mano y eso me hace feliz.

¿Qué significa para ti el programa de radio?

Mucho. Recuerdo que fue difícil vocalizar, pedía a la profesional que me ayudara sobre todo a recuperar mi herramienta que es la voz. Antes de encender el micrófono hago ejercicios con la voz. Cuando me sentí seguro quise encarar un programa que ayudara a conocer mi realidad sobre la discapacidad.

¿Qué te deja todo este aprendizaje?

Aprendí que las personas que pasan lo mismo que yo necesitan aliento y escuchar un espacio donde se sientan identificados. No es un programa más que habla de música, política. El tema de discapacidad para mí es tratar de dar mayor visibilidad, las entrevistas permiten encontrar a otras personas que no se quedan encerradas en casa sin poder luchar, levantar nuestro ánimo y realizar la actividad que hayamos decidido.