Macarena Bazán tenía todo listo para acompañar a Luz a su primer día en sala de 5. Después de un año alejado de sus compañeros y maestras, la niña por fin volvía al aula, así que esta mamá sanjuanina había pedido con tiempo el día libre en el trabajo para no perderse ni un segundo del ansiado regreso a clases. Uniforme, útiles, mochila todo se había preparado con mucha antelación, pero un aviso sobre la hora le quemó todos los papeles: el colegio cambió la fecha del comienzo.
“Ahí comenzó la odisea para ver quién podría llevar y traer a la pequeña a la escuela porque mi madre también es docente y debía cumplir con su labor“, contó Macarena al recordar esos días en que todo era tensión. Decepcionada porque no encontraba solución, la joven le contó su problema a su abuelo Julián, al que todos conocen como Tata Tito. Y entonces, el gran héroe de esta historia, se postuló sin dudarlo.
No tiene capa, no tiene espada, pero a sus 77 años el gran Tito está dispuesto a darlo todo por su familia y en especial por su bisnieta de 5 años. “Yo la llevo con gusto“, dijo el súper abuelo y comenzó desde ese mismo instante a prepararse para el gran evento.
“Quedamos en que la acercaría a su domicilio cerca de las 7.15 de la mañana porque yo ingreso a mi trabajo a las 8 y me queda un poco lejos y Lú también entra al jardín a esa hora“, describió Macarena, que se convirtió en una celebridad en las redes sociales a partir de esta historia. Pero aquella mañana en que su hija volvía al ritmo escolar ella no pensaba en Facebook, ni en likes, simplemente soñaba con que su niña estuviera perfecta para que todo saliera bien. Es por eso que el sonido del timbre a las 7.10 de la mañana la sorprendió. “Asustada por la hora miré por la ventana para ver quién venía a esa hora y era él“.
“Peinadito, camisa, pantalón de vestir y zapatos. Arreglado, con una presencia más que notable, Tata Tito se vino a buscar a su bisnieta para llevarla al jardín. Aún lo recuerdo y me da una alegría, es un sentimiento inexplicable“, confiesa Macarena que no pudo contener la emoción y sacó su teléfono y mientras Luz y Tito caminaban les sacó la foto que hoy es un fenómeno viral en toda Latinoamérica.
“Recibí y sigo recibiendo miles de mensajes con muestras de cariño para mi hija Luz y mi abuelo Argentino Julián (Tata Tito) de gente de todo tipo de edad, de muchas partes de Argentina e incluso de otros países“, relata la joven que no puede creer la enorme repercusión que tuvo su publicación.
¿Y cómo recibió Luz a su bisabuelo aquella mañana?
Lú ya estaba lista con su pantalón azul, remera y medias blancas y pintorcito naranja. Bañada y peinada esperando el momento de irnos y cuando lo vio corrió a sus brazos gritando: “¡Tata!“. Después agarraron su morral y la mochila y partieron hacia la escuela. No pude evitar salir y mirar esa hermosa postal que quedó grabada en una foto y en mi retina para el resto de mi vida.
Para Maca fue difícil asimilar que no iba a poder estar en ese primer día de jardín, así que mientras luchaba para concentrarse en sus tareas del trabajo, se tomó un momento y compartió aquella foto, sin pensar que iba a revolucionar las redes.
“Mamá no pudo asistir a tu día primer día de clases por los horarios laborales pero ahí estaba él… Peinadito, camisa, pantalón de vestir, zapatos, muy buen mozo nos golpeó la puerta del departamento para llevar a su bisnieta al jardín. Su ansiedad era más grande que la de Luz y yo derritiéndome de amor al verla como corrió a sus brazos, feliz de verlo llegar y porque iba a ser su compañía este día tan importante. Agradezco día a día tenerlo junto a nosotras. El tata Tito es nuestro ángel guardián“, escribió Macarena al publicar la foto.
“Jamás imaginé que iba a tener tantos ‘me gusta’, tanta repercusión (casi 40mil veces compartidas desde mi perfil) y sobre todo tantísima gente identificada por esa imagen“, dice emocionada por el reconocimiento y afecto.
El cercano vínculo de Macarena y sus abuelos se remonta a su infancia cuando Tito y su esposa Hilda la cuidaban mientras su mamá trabajaba. Ya como adulta, la joven ahora cuenta con la ayuda de los abuelos con Luz. “Soy madre monoparental y hace 2 años que vivimos solas. Elegí vivir en un lugar cerca de ellos porque siempre fui muy apegada“, explica.
Ahora esa amistad cómplice que ella tuvo con sus abuelos se replica con la bisnieta: “Son los que generalmente cuidan de Luz la mayoría de los días de la semana mientras yo trabajo. Mi abuelo es quien está mejor de salud por ende es el que más ‘activo’ está en el cuidado de mi hija. Van a la plaza, hacen las compras, juntan moras de los árboles. Son muy unidos y están siempre el uno para el otro“. Está claro que para Luz y su súper abuelo, este va a ser un año de muchas aventuras.
FUENTE: CLARÍN