La historia de Martín Ferreira: hace 17 años que ayuda a más de 450 familias de barrios vulnerables

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Fundador de SonRisas, una asociación civil de Esteban Echeverría, es uno de los 8 seleccionados para la final del certamen que reconoce proyectos solidarios.

Para ayudar no hay edad. Y eso la sociedad lo sabe muy bien. Desde hace 17 años, Martín Ferreira, de 39 años, busca incansablemente que los niños, las niñas y adolescentes que viven en algunos de los barrios más vulnerables del partido de Esteban Echeverría, provincia de Buenos Aires, sean adultos con más herramientas y oportunidades. ¿Cómo lo hace? A través de su asociación civil, SonRisas, que trabaja todos los días porque estos chicos recuperen sus derechos a vivir una infancia plena y feliz.

Desde sus centros sociales, ubicados en los barrios de Lauda, Pantano y Las Chacritas, SonRisas trabaja con más de 450 familias y alrededor de 1.300 chicos de forma directa. Ofrecen acompañamiento escolar, y organizan talleres culturales, artísticos y recreativos, así como de formación laboral para los adultos. En estos centros trabajan más de 150 personas, entre voluntarios, docentes, talleristas, asistentes sociales y psicólogos.

Una vez que llega un niño de acá, del barrio, se desarrolla todo un dispositivo que incluye entrevista a las familias y visita a las casas”, cuenta Martín, que fue elegido como Abanderado de la Argentina Solidaria de la edición 2021, “Luchamos contra viento y marea por hacer el trabajo artesanal, caso a caso, y familia por familia”.

Desde SonRisas desarrollaron un original programa de contraprestación, a través del que 70 familias -en su mayoría, madres- realizan una hora de trabajo comunitario a cambio de un canasto de alimentos por semana. También entregan muebles y electrodomésticos. “SonRisas para mí es una familia. Un lugar donde me siento contenida, siempre hablo con las chicas. Me siento muy bien acá”, destaca Alejandra Perea, una de las vecinas del barrio y colaboradora de la sede central de SonRisas.

Martín anhela que, durante su infancia, los chicos puedan encontrar en sus centros sociales lugares alternativos a la calle para estudiar, jugar y ejercer con plenitud sus derechos. “En esa persona que hace un cambio, que encuentra herramientas, oportunidades, sentimientos e ideas, ganas y esperanza para salir adelante, y sale adelante, está todo. Es lo que hacemos”, concluye.

Conocé más sobre su historia en www.premioabanderados.com.ar o en las redes sociales del Premio Abanderados Twitter: @AbanderadosARG Facebook: /PremioAbanderados Instagram: @abanderados

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