POR SEBASTIÁN SAAVEDRA
Jimena Chaves es la realizadora y productora de “Matria”, una película documental sobre las madres que perdieron a sus hijos en la Guerra de Malvinas. La historia parece conocida, pero el abordaje de la misma viene desde otro punto de vista. Sin eje en la guerra, sin tintes políticos, y con búsqueda de enseñanza, Jimena nos cuenta detalles, historias, y sensaciones de la realización de la misma, y cómo llegó esta inquietud de contar esta parte de la historia.
-¿Cómo nace tu vínculo con Malvinas?
Mi vínculo nace desde la infancia. Tengo un primo de mi padre llamado Juan Ramón Turano, cuya madre (Juana) vive en Entre Ríos. Juan murió en la guerra, y entonces en mi familia no se hablaba mucho del tema, pero cuando iba a la casa de Juana me mostraba cosas del hijo, tocábamos el piano, y también recuerdo entrar a la habitación que era de sus hijos, y que estuviese intacta. Eso me impactaba.
Ya en el 2017 fui convocada para grabar la vigilia de Malvinas, y preferí decir que me gustaría hacer un documental al cual terminé llamando “Lo que teníamos en la cabeza”, que cuenta la historia de cuatro ex combatientes , algunos de rosario, el documental está atravesado por la música , que escuchaban antes, durante, y después de la guerra. Esto permitió adentrarnos en los sentires e intimidades de cada uno. A su vez, se va entretejiendo con la vigilia de los 35 años donde se tocaron canciones elegidas por los ex combatientes y fueron interpretadas por músicos de todo el país . Este trabajo vino a reconfirmar mi vínculo desde la infancia; y en ese momento comencé a pensar en “Matria”.
-¿Y cómo siguió la idea de hacer la película?
Ya en el 2019 fuimos a hablar con mi tía abuela que nos contó un montón de cosas, y nos dio el puntapié inicial para pensar bien el origen. Ese año tuve la oportunidad de conocer madres de Malvinas, y al ser madre comencé a dimensionar que estas mujeres nunca habían tenido la voz necesaria, ni el reconocimiento, y hasta que incluso no se conocían entre sí. Todo esto me convenció de hacer la película de una manera diferente, contando estas historias íntimas o personales pero desde el lugar de las voces calladas, el tratamiento del sonido, y buscando una construcción más amplia dónde pueda mostrar no solamente lo que se escucha.
-Cuando charlaste con las madres, ¿qué fue lo que más te impactó?
Todas las historias me impactaron. Son totalmente particulares, te conmueven, y no podés entender como esas mujeres sacaron fuerza para seguir adelante. Es obvio que se puede, todo se puede, pero acá mostramos gente de todos lugares de Argentina que se aferraron a lo que pudieron: religión, la mísmisima soledad, el silencio. La más shockeante de todas fue una madre que me confesó que desde que perdió a su hijo está en un estado de “no sentir” (así lo define ella), y no puede llorar. Para aliviar el dolor de su cuerpo grita; es la madre más grande Malvinas, y tiene 96 años.
-¿Podés contarnos o anticiparnos algo de la película?
La película se corre del eje de la guerra y no hay color político, y eso se nota. Son historias fuertes, y si bien cuando arranqué con la peli estaba atravesada por todo este dolor y el sufrimiento me pegaba bastante, pude hacer un click y resignificar el dolor desde otro lugar. Es fuerte, tiene mucha carga, pero te deja enseñanzas de esperanza y amor.
Matria cuenta con los testimonios de Gonaria, Elma, Delmira y Ninoi, cuatro mujeres cuyos hijos participaron de la Guerra de Malvinas
-¿Cuán importante creés que es para las generaciones más jóvenes poder formar parte de esta memoria?
Es importante que la vean para seguir expandiendo o hablando de Malvinas desde otro lugar, desde estas voces que nunca fueron contadas en la historia nacional. Hicimos un visionado como pre estreno y había muchos jóvenes que recibieron muy bien la película. Comprenden o entienden desde otro lugar Malvinas más allá de lo que le puedan contar sus padres o la escuela.
-¿Algo que quieras agregar?
Como realizadora y gestora de este mini universo, estoy, y estamos, muy contentos con mis amigos y compañeros con el cual tejimos la película que pudimos hacer y contar esta historia desde otro lugar. Hay mucho respeto y amor, y es la primera vez que van a escuchar cosas que esas madres nunca dijeron. Esto que gestamos hizo que en 2021 contemplemos el 3 de abril como el Día de las Madres de Malvinas, un proyecto que sería un deseo personal que se pueda algún día pronunciar como el Día Nacional de las Madres de Malvinas.
