Inclusión: tiene parálisis cerebral y practicó 11 deportes

Historias para contar Slider

El jujeño Augusto Herrera es un verdadero ejemplo de superación y no baja los brazos en su lucha por la inclusión de las personas con discapacidad.

Desde su primer día de vida, Augusto Herrera demostró sus ganas de vivir y ser un luchador porque nació prematuro, a los 6 meses de gestación, midió tan solo 40 centímetros y pesó 780 gramos, pero ese peso descendió a los 600 gramos con el correr de los días. De ese diagnóstico al día de hoy hay una historia de superación y de inclusión digna de imitar.

El panorama fue crítico durante sus primeros días de vida y el diagnostico de los médicos no era para nada alentador y hasta le dijeron a sus padres que “no creían que iba a pasar la noche”, lo dejaron en una incubadora y con respirador. Pero pasaban los días y el pequeño guerrero resistía y resistía hasta que empezó a mostrar algunas mejoras.

La situación seguía siendo crítica porque pese a poder sobrevivir, podía quedar con graves secuelas como estar inválido o ciego, y en condiciones aún peores cuenta Adriana, su madre. También dijo que hasta el sexto mes de embarazo no había tenido ninguna dificultad y cuando nació recién le dijeron que el bebé no se había desarrollado como corresponde dentro de la panza.

Cuatro meses de lucha

Sus primeros cuatro meses de vida fueron así, con diagnósticos médicos que indicaban lo peor, pero que de a poco se revertían. Los avances de Augusto sorprendían a los especialistas y a su familia que lo acompañó todo el tiempo y desde ese momento empezó a ver algo en el pequeño que conserva hasta el día de hoy: su ímpetu por anteponerse a situaciones difíciles. Finalmente y después de cuatro largos y duros meses, pudo irse a su casa con el diagnostico de parálisis cerebral.

El deporte y la inclusión

Desde muy pequeño, Augusto Herrera demostró su afinidad al deporte ya que después de pasar por esa tormenta tan dura que fueron sus primeros meses de vida se interesó mucho por las pelotas y por la actividad física. De a poquito empezó a practicar sus primeros deportes, algo que nadie imaginaba. “Desde chiquito que siempre buscó hacer de todo, estar en todos los espacios posibles ya que sea deportivos como sociales. Es muy inquieto y siempre se las rebusca para seguir adelante y hacer lo que le gusta”, expresó Adriana, su madre.

Su pasión es el fútbol, la natación y el baile, pero a lo largo de sus 24 años practicó también karate, patín, tenis, tenis de mesa, básquet, atletismo, taekwondo, hóckey y skate. Además, compitió en torneos provinciales en varias disciplinas y también en nacionales como ser los Juegos Evita donde obtuvo premios y medallas que trajo para su casa en la localidad de Palpalá.

Un mensaje de superación

“Ninguna persona con discapacidad tiene que bajar los brazos, siempre hay que buscar la inclusión, cumplir nuestros sueños y hacer deporte que es lo más lindo. Además haciendo deporte conoces a amigos y te divertís mucho”, comentó Augusto Herrera. Por último incentivó a otros chicos con discapacidad para que busquen la inclusión social: “Nadie te tiene que decir que no podés porque si se puede, hay que esforzarse un poco y no ponernos mal si tenemos un día malo o si alguien nos dice algo negativo. Volvernos a levantar siempre es fundamental para superarnos cada día y seguir adelante, pese a las adversidades que se presentan en la vida”, concluyó el joven.

Suscribite
Notificarme de
guest
0 Comentario
Ver todos los comentarios