Fútbol: de ser albañil a jugar en uno de los clubes más importantes del mundo

Deportes Slider

Federico Gatti debió interrumpir su sueño de ser futbolista porque su padre se quedó sin trabajo, transitó casi todas las divisiones del fútbol italiano.

Si de superación, resiliencia y vencer obstáculos se habla, la historia de Federico Gatti es claro ejemplo de ello. El defensor central italiano tuvo que dejar en segundo plano el fútbol porque su padre se quedó sin trabajo, se dedicó a la albañilería, transitó casi todas las categorías del fútbol italiano y en agosto defenderá los colores de la Juventus en la única división del Calcio que le falta jugar: la Serie A. Todo, en cuestión de unos pocos años. Conocé su historia.

Cuando Gatti estaba formándose como futbolista pasó por las divisiones inferiores del Torino y de Alessandria. Sin embargo, el destino le jugó una mala pasada a él y a su familia y cuando su papá quedó sin trabajo, tuvo que sacar a su familia adelante, pero eso sí, él sabía que abandonar la número cinco no era el camino: “Mi padre se quedó sin trabajo y yo tenía que corresponder los esfuerzos que hizo por mí. Trabajé como albañil, fabricando ventanas o reparando techos. Empezaba de madrugada y era duro pero formativo. Trabajé y jugué para compensarlo”, comentó en una entrevista.

Sin embargo, también reveló que dicha situación – y su padre- fueron uno de los motores que lo impulsó a seguir intentando convertirse en un futbolista profesional y poder vivir de ello: “Tomé de mi padre y de la rabia que tengo dentro. Es una venganza para mí. Encontré puertas cerradas, en los sectores juveniles de Turín y Alessandria no tenía espacio. Quiero imponerme”.

Tras quedar libre de las divisiones formativas del humilde Alessandria, Gatti se fue a probar suerte al Eccelenza, un equipo de la quinta división del fútbol italiano, que estaba al borde de la quiebra y por ello estaba en la búsqueda de futbolistas juveniles. “Se acabó el dinero y se fueron todos los jugadores. Yo decidí quedarme”, recordó Federico sobre aquellos momentos.

Sin embargo, allí Gatti encontró su posición dentro del verde césped, ya que al contar con un gran porte físico y una gran estatura, el técnico tuvo que retrasarlo en el campo de juego: de mediocampista pasó a jugar como defensor central.

Luego de su paso por el Eccelenza, comienza lo más interesante. Llegó el turno de defender los colores del Verbania de la Serie D y en 2020 fichó por el Pro Patria de una categoría superior, la Serie C. Allí disputó la temporada pasada y tan sólo estuvo un año, en el cual quedaron sextos en la tabla de posiciones y jugaron los play-offs para lograr el tan ansiado ascenso a la Serie B. No obstante, su equipo cayó derrotado ante la Juventus Sub-23, su actual equipo, en la primera ronda.

En agosto del 2021, Gatti daría un salto más de categoría. El Frosinone, de la Serie B, posó sus ojos en él y se quedó con sus servicios mediante un desembolso de 100.000 euros. Allí, en el conjunto frusinati, en tan sólo la primera vuelta del certamen lo nombraron como el “Mejor Central de la Serie B” de la primera ronda junto a Barba, colega suyo de posición, pero del Benevento. Tras semejante reconocimiento, Gatti estaba en la mira de diversos clubes de la máxima categoría del fútbol italiano. ¿Entre ellos? Napoli, Torino y Juventus fueron los confirmados, pero también sonó su nombre para el Inter, Milan o Lazio.

En el deadline del mercado de fichajes europeo, la Vecchia Signora oficializó su contratación a cambio de 7.5 millones de euros. Así, quien arrancó su carrera en el más profundo amateurismo del Calcio será jugador de uno de los más poderosos clubes del mundo hasta 2026. Sin embargo, el conjunto de Turín decidió que se quede en Frosinone hasta fin de esta temporada y recién en agosto vestirá el manto bianconneri.

Suscribite
Notificarme de
guest
0 Comentario
Ver todos los comentarios