POR SEBASTIÁN SASSON
En el amplio catálogo de películas sobre viajes en el tiempo, “About Time” destaca como una joya única que combina la ciencia ficción con una profunda reflexión sobre la vida y el amor. La película se aleja de lo típico para centrarse en los momentos cotidianos que dan forma a nuestras vidas.
La trama sigue a Tim Lake, interpretado por Domhnall Gleeson, quien descubre que los hombres de su familia tienen la habilidad de viajar en el tiempo. Aprovechando esta capacidad, Tim intenta mejorar su vida amorosa, pero pronto se da cuenta de que cambiar el pasado tiene consecuencias inesperadas. En el camino, se enamora de Mary, interpretada por Rachel McAdams, y juntos exploran las alegrías y desafíos de la vida.
Lo que distingue a este film, dirigido por Richard Curtis, es su enfoque en la aceptación de la vida tal como es, con todas sus imperfecciones. Demuestra la importancia de apreciar los momentos presentes y encontrar la felicidad en las pequeñas cosas de la vida. A medida que Tim aprende a aceptar los eventos tal como son, la película transmite un mensaje conmovedor sobre vivir con gratitud y amor incondicional.
Por otro lado, la cinta no solo relata una relación amorosa entre dos individuos, sino que también habla sobre las relaciones padre e hijo. La relación entre Tim y su padre, interpretado por Bill Nighy, añade una capa adicional de profundidad emocional a la historia. Sus conversaciones sobre la vida, el amor y la familia son conmovedoras y repletas de sabiduría.
“About Time” nos recuerda que el tiempo es un regalo precioso y que debemos aprovechar al máximo cada momento. Nos invita a reflexionar sobre nuestras propias vidas y a valorar las relaciones y experiencias que dan sentido a nuestra existencia.
