La interpretación aprobada por la Confederación Argentina de Sordos conjuga arte, poesía, música en consonancia con la LSA como idioma natural. Con la sanción de la Ley 27.710 toma más relevancia.
El 11 de mayo se conmemora el Día del Himno Nacional Argentino al recordarse la fecha en que la Asamblea del año XIII sancionó como «Himno» a la marcha patriótica que llevaba letra de Vicente López y Planes y música de Blas Parera.
Según los historiadores, fue interpretado por primera vez en la casa de Mariquita Sánchez de Thompson por primera vez el 14 de mayo de 1813.
Recién el 24 de abril de 1944, esta Marcha, con la letra que hoy conocemos, fue aprobada como el “Himno Nacional Argentino”.
Además de todas las versiones interpretadas por diferentes artistas musicales existe la versión en Lengua de Señas aprobada y consensuada por la Confederación Argentina de Sordos, y que gracias a la Ley 27.710 sancionada este año y que reconoce a la lengua de señas como natural de las personas sordas en todo el territorio argentino, pudo oficializar los cambios en su versión.
Más igualdad
Natalia Vélez, quien perdió la audición hace 23 años, y ahora es profesora de Lengua de Señas, el “himno viejo” que se aprendió hace muchos años, se traducía palabra por palabra a manera de oyente, en cambio ahora se usa el ideado por la comunidad sorda con su propia gramática.
Según indica el sitio de la Confederación Argentina de Sordos (CAS) se trata de una traducción artística audiovisual, que atravesó distintas etapas de capacitación sobre cuestiones históricas, lingüísticas y musicales relativas al Himno Nacional Argentino.
En ese sentido Natalia aclaró que los principales con la versión en señas del himno viejo radican en que antes se decían palabra por palabra estrofas como “Oíd mortales el grito sagrado” y ahora esas frases se realizan desde la lingüística y la interpretación de la LSA.
“Ahora, con la aprobación de la Ley de Lengua de Señas, los oyentes tienen que aprender a aceptar esa estructura. Los sordos están contentos, fue un gran logro. Yo comparto la alegría y la felicidad de la comunidad sorda”, aclaró.
Las últimas versiones oficiales aprobadas por la CAS eran de 2018 y de 2021, y se continuó hasta ahora trabajando en su modificación.
FUENTE DIVERSIDAD