Se trata de un galardón internacional que garantiza calidad del agua y servicios, entre otros criterios estandarizados.
Buenas noticias para dos balnearios marplatenses: San Sebastián de La Perla y Mediterráneo de Punta Mogotes se hicieron acreedores de la distinción “Bandera Azul“, un galardón internacional que garantiza el desarrollo sustentable de espacios al aire libre relacionados con el turismo concedido por el capítulo argentino de la Fundación para la Educación Ambiental ( FEE, Foundation for Environmental Education), cuya sede está en Dinamarca.
La prestigiosa bandera lleva el aval de la Organización Mundial de Turismo (OMT), el Programa de Naciones Unidas para el Ambiente (PNUD) y la Unión Internacional para la Naturaleza (IUCN).
Se la considerala etiqueta ecológica voluntaria más reconocida del mundo. Se otorga a playas, marinas y paradores de turismo náutico sostenible.
Pablo Pilaftsidis, uno de los responsables de ambos balnearios galardonados expresó: “Estamos muy contentos de la distinción internacional y es algo que nos compromete a seguir mejorando. Tenemos que trabajar y continuar en consonancia con los cambios que desde hace tiempo, gran parte del mundo trabaja denodadamente, para cambiar la calidad de vida. Además, tenemos pensado comprar equipamiento que nos ayudará a mejorar cada día más”.
Los requisitos
Para merecer el premio tuvieron que cumplir con una serie de criterios estandarizados de “calidad de agua de baño, gestión ambiental, educación ambiental, seguridad y accesibilidad”. Ambos balnearios son los primeros y únicos establecimientos argentinos en recibir el reconocimiento.
Para certificar el cumplimiento de los requisitos, que se encuentran en los 33 criterios estandarizados de quienes buscan obtener la Bandera Azul por el manejo de las operaciones que deben cumplir los concesionarios, viajaron representantes especialmente desde Italia a Mar del Plata, ocasión en la que además, quedaron encantados al conocer la Perla del Atlántico.
Los criterios para obtener la Bandera Azul se dividen en cuatro áreas fundamentales: Calidad de las aguas de baño, Información y Educación ambiental, Gestión ambiental y Seguridad, Servicios e Instalaciones.
Una vez que se constata que se cumplen los 33 criterios estandarizados del programa, se presenta la candidatura ante profesionales del Ministerio de Ambiente y de Salud, junto a otros organismos, que luego la remiten a un jurado internacional que se reúne en Copenhague y define la entrega de las banderas.
Francesca Abeltino, la directora ejecutiva de la Fundación para la Educación Ambiental Argentina, acotó: “Todo esto ha sido posible debido a los avances que tuvo la ciudad en relación al buen manejo de sus aguas cloacales. Con la puesta en marcha de la planta de tratamiento en el 2018 y la construcción anterior del emisario submarino en el año 2014 que permitieron que los índices bacteriológicos del agua de baño en las playas marplatenses tengan los mismos parámetros exigidos por la Unión Europea para aguas recreativas”.
El trabajo sistematizado que realiza Obras Sanitarias Sociedad del Estado (OSSE) Mar del Plata en el control microbiológico del agua de mar con mediciones que datan del año 1995 han sido determinantes.
Según Antonio Molina, director nacional del programa Blue Flag, “uno de los pilares fundamentales del programa es la calidad del agua recreativa de baño y en esto, Mar del Plata tiene una enorme ventaja si se compara con el resto del país, debido a los trabajos realizados y a los archivos históricos. Lo que hizo OSSE, para nosotros, es una prueba piloto para otras localidades que quieran aplicar al programa, con monitoreos exhaustivos y cinco muestreos por temporadas en intervalos no menores a 31 días”.
Los balnearios, para ser elegidos, tuvieron que demostrar que cuentan con “una zona de baño con al menos un punto de recogida para el análisis de la calidad del agua”. Tanto los límites de la playa como el nombre deben ser reconocidos de modo oficial y pueden estar situados en aguas costeras/marinas o interiores.
El programa
El programa “Bandera Azul” tuvo su nacimiento en Francia hace 35 años. Fue recibido por más de 48.000 playas, marinas y embarcaciones turísticas de 50 países.
En 2023, Argentina forma parte con los balnearios San Sebastián y Mediterráneo. Un reconocimiento muy importante que implica el inicio de acciones futuras y un modelo para otros balnearios del país.
Agregó Molina: “La mayoría de los balnearios de Mar del Plata tiene muy buena infraestructura y altos estándares de calidad”.
Una cuestión primordial del programa consiste en cumplir con el objetivo de conectar al público con su entorno e incentivarlo a aprender más sobre el ambiente y los establecimientos. En este caso, los balnearios deben promover y ofrecer actividades de educación ambiental, así como también una exposición permanente de información relacionada con el lugar en lo que respecta a los ecosistemas, los fenómenos ambientales y a la biodiversidad.
Se espera que Mar del Plata pueda lograr más reconocimientos en la próxima temporada con sus más de 40 balnearios, integrándose de modo lento pero sin pausa a la tendencia mundial de los programas y la conciencia de la importancia de la sostenibilidad.
“Agua pura, costas limpias, seguridad y accesibilidad para todos”. Cumpliendo los criterios exigidos, en 2023, los países que tienen mayor cantidad de Blue Bag son España. La siguen Grecia, Turquía (el único destino no europeo), Italia, Francia (especialmente por la limpieza de sus costas), Portugal y Dinamarca.
Los ambientalistas y viajeros cada vez hacen más foco en las playas con el sello Blue Flag, buscando espacios de calidad y servicios. Como el reconocimiento dura sólo un año, obliga a quienes tienen a cargo los establecimientos que continúen manteniendo el nivel para seguir mereciendo la insignia, lo cual da la confianza necesaria para saber que se siguen cumpliendo los requisitos exigidos a nivel global para construir y caminar hacia un mundo más sostenible.
En el marco del Plan Local de Acción Climática, la municipalidad de General Pueyrredón desarrolló, durante este verano, un ciclo de charlas orientadas a la comunidad y al público en general sobre prácticas y tecnologías que contribuyen a la sostenibilidad ambiental.
Las charlas tienen como protagonistas a emprendedores sociales y expertos locales en temas específicos vinculados a la protección del patrimonio natural, la economía circular y la relación entre salud y ambiente.
Los citados emprendedores tienen su actividad con descarte de plástico, con los que trabajan con los botánicos orgánicos y los que hacen compost (producto que se obtiene del proceso de compostaje, que consiste en la oxidación controlada de distintos materiales orgánicos).
El marco de las charlas tiene como escenario las playas públicas, para concientizar y emprender con impacto social y ambiental. Deborah Sabsay, titular de Kausana, consultora en gestión de Triple Impacto, sostuvo: “Procuramos que las acciones que se vienen desarrollando, en acompañamiento al municipio, apuesten a generar un cambio cultural, en la dimensión social y ambiental. Habitar con una nueva mirada los espacios naturales”.
Embajadores Verdes, la organización ambiental, hace unos días invitó a locales y turistas a una jornada en Playa Grande para recolectar residuos y dictado de talleres para dar herramientas a la ciudadanía para concientizar sobre la importancia del medio ambiente. Acciones similares son realizadas por “Playas Limpias ok”.
FUENTE: CLARIN
