Una gran iniciativa solidaria de una niña, que no solo pensó en ella, sino también en la gente de en situación de vulnerabilidad.
Los niños tienen ideas maravillosas. En este portal, contamos la historia de Orion Jean, un chico de 10 años que donó medio millón de libros. Y hoy, les vamos a mostrar a una chica que también tuvo una gran iniciativa solidaria en la semana de la niñez.
“Cuando sacamos 10 animales, me dijo que los iba a donar a los niños necesitados, entonces tuve la idea de llevarlos a una institución de la ciudad (…) Establecimos la meta de 50 animales para donar”, señaló el padre de la niña, Jair Ribeiro. Claramente la pequeña tiene aceitada la técnica para sacar los juguetes al exterior. La protagonista de esta tierna historia se llama María Clara y el hecho sucedió en la populosa ciudad de San Pablo, Brasil. Según palabras de su progenitor, su gran habilidad en esta máquina se dio casi por casualidad. “Todo empezó como una broma. Cuando íbamos a recoger a mi esposa al supermercado, fuimos a buscar el peluche que Clara quería”, manifestó el hombre.
La acción solidaria
Lo grandioso de esta historia no es solamente el “don” de María para obtener los peluches a través de esa garra mecánica, sino la acción solidaria que realizó. La infante decidió junto a su papá donar 32 de esos juguetes a un hogar de niños sin familia. La institución escogida fue “Lar da Criança de Mairinque”. Este lugar aloja a cientos de niños que han soportado distintos problemas familiares y de abandono.
“En dos meses tuve suerte y atrapé 58 osos de peluche (…) Siempre me gustó ayudar” indicó la solidaria niña. Inclusive María Clara buscará continuar con su objetivo de sacarle una sonrisa a más niños. “Quiero donar más, pero todavía no sé cuántos. Los niños estaban muy contentos con la donación de los animales, estaban muy agradecidos. Estaba muy feliz con eso” finalizó la joven brasileña.