La jueza de Primera Instancia de Personas y Familia de Segunda Nominación de Tartagal, Carmen Elena Juliá, restituyó el derecho de un niño a vivir en familia luego de permanecer durante cinco años en el hogar de niños Padre Gualterio Ansaldi de esa ciudad de la provincia de Salta.
A la espera de postulantes que se sintieran preparados para asumir las funciones parentales, el niño permaneció bajo la protección del Estado. A través de una convocatoria pública nacional, se accedió a un legajo que provino de Jujuy, cuyos postulantes expresaron el deseo de ser padres jóvenes para disponer de energía y vitalidad.
Las necesidades particulares y los requerimientos de tratamientos de salud para este niño de cinco años no fueron un impedimento para conformar un proyecto de familia.
Se trata de una pareja que dispone de capacidades especiales para cuidar y dar amor a este niño. Luego de varios días de iniciado el proceso de vinculación entre ellos y el pequeño, solicitaron a la señora jueza se les otorgue la guarda con fines de adopción.
“Se otorgó la guarda con fines de adopción a un matrimonio. El niño hacía bastante tiempo que estaba esperando tener una familia. Goza de buen estado de salud, pero tiene TEA, es decir, autismo. Desde que nació, prácticamente vivió en el hogar y fue declarado en estado de adoptabilidad. Tras una convocatoria pública, se presentó una pareja joven que manifestó que quería dedicarse al cuidado del niño”, explicó Juliá en diálogo con Cadena 3.
Y añadió: “Por la dificultad que tiene, el niño tiene algunas dificultades en el habla. Pero cuando hay amor y contención, se pueden lograr cosas maravillosas”.
De la audiencia participaron la Asesoría de Incapaces 1, a cargo de Juan José Andreu; la fiscal Civil Rosa Vélez y por el Poder Judicial, el equipo conformado por Estela Lizondo y Olga Rodríguez, como así también el equipo de la Secretaría de la Niñez y la Familia. El expediente se tramita en el Juzgado de Personas y Familia Nº 2 de Tartagal.
Fuente: Cadena3
