Tiene 17 años y quiere ser parte de la revolución interplanetaria

Historias para contar Slider

Antes de irse a dormir, Jerónimo Mendoza sueña con el vasto universo. Tiene 17 años y está cerca de terminar la secundaria, una etapa que transitó con absoluta normalidad y que encontró su punto de inflexión luego de realizar una pasantía de trabajo.

Cuando era chico, Jerónimo coleccionaba dinosaurios y leía historias de ciencia ficción, en donde muchos de los protagonistas viajaban al espacio o venían a la Tierra desde allá, un lugar lejano en su imaginación. Sin embargo, a partir de este giro en su vida comenzó a verlo con mayor cercanía.

En el marco de las Actividades de Aproximación (ACAP) que lleva a cabo la Ciudad de Buenos Aires, el joven nacido en Recoleta se unió a Space Kids, una fundación con aportes privados que busca preparar a los jóvenes para la era interplanetaria prevista entre 2032 y 2035. La entidad trabaja pensando en resolver problemas actuales en la región, proyectando una mejor formación de educación donde el Espacio, la inteligencia artificial, el metaverso industrial y la computación cuántica serán las bases de este nuevo mundo.

“Desde chico siempre quise ser parte de algo más grande. Ahora, después de esta experiencia, tengo claro que quiero estudiar Bioingeniería cuando termine la secundaria. Era algo que tenía en la cabeza, pero me terminé de convencer al sentir fascinación por entender cómo los avances tecnológicos pueden cambiar la vida de las personas, sobre todo en el ámbito espacial”, contó Jerónimo a TN.

El adolescente vive en Recoleta junto a su mamá (Foto: Jerónimo Mendoza).
El adolescente vive en Recoleta junto a su mamá (Foto: Jerónimo Mendoza).

Su aventura comenzó cuando su profesora de contabilidad en el Instituto del Carmen le propuso participar en un programa de pasantías en la fundación. “Investigamos con mis compañeros y tuvimos una entrevista”, recordó. Tras ser aceptados, él y otros alumnos decidieron lanzar un canal de TikTok enfocado en transmitir mensajes positivos sobre la educación y el espacio: “Era como una forma de hacer visible lo que nos apasiona”.

Sus actividades allí abarcaron diversos temas, siempre relacionados con la educación y los progresos en tecnología espacial. “Lo que más me impactó fue comprender que estamos en la puerta de una revolución interplanetaria. No solo se trata de habitar otros planetas, sino de cómo podemos aprovechar los recursos del espacio para mejorar la vida aquí en la Tierra”, aseguró.

Jerónimo (gorra blanca) junto al resto de sus compañeros que forman parte de Space Kids, acompañados por Chris Meniw, CEO de la fundación (Foto: Jerónimo Mendoza).
Jerónimo (gorra blanca) junto al resto de sus compañeros que forman parte de Space Kids, acompañados por Chris Meniw, CEO de la fundación (Foto: Jerónimo Mendoza).

Space Kids tiene como objetivo preparar a la juventud para lo que llaman “la economía interplanetaria”, donde el desarrollo tecnológico y la exploración del espacio se convierten en herramientas fundamentales para enfrentar los retos actuales. “El rol de la juventud es clave. Si queremos avanzar, necesitamos que nosotros, los jóvenes, seamos parte del desarrollo”, subrayó Jerónimo.

Su deseo de viajar al espacio no es solo un “capricho adolescente”, sino más bien una ambición pensada. “Cuando uno viaja al espacio el metabolismo se comporta de manera diferente. La bioingeniería puede ayudar a que los astronautas se adapten a esos cambios. Quiero ser parte de eso”, explicó.

El adolescente comenzó a verse atraído por la revolución interplanetaria a partir de su experiencia en la fundación (Foto: Jerónimo Mendoza).
El adolescente comenzó a verse atraído por la revolución interplanetaria a partir de su experiencia en la fundación (Foto: Jerónimo Mendoza).

Una de las iniciativas que más lo entusiasma es la “granja robótica”, un proyecto que comenzará en 2025 y que busca automatizar la cosecha de cultivos para donar alimentos a familias vulnerables. “Es un sueño que se alinea con mis aspiraciones. Me gustaría trabajar en proyectos que combinen tecnología y ayuda social. La idea de contribuir a un futuro mejor me motiva”, dice con un aire de responsabilidad.

El impacto de su experiencia en Space Kids ha sido profundo. “La educación que recibí en el colegio me sirvió para abrirme al mundo. Leer me permitió entender diferentes realidades y me ha impulsado a querer aprender más”, reflexiona. Con la certeza de que su camino ya está trazado, Jerónimo mira hacia el futuro con confianza. “Estudiar bioingeniería es solo el comienzo. Mi meta es ser parte del progreso de la humanidad y poder viajar algún día al espacio”.

Jerónimo es un apasionado de la lectura desde pequeño (Foto: Jerónimo Mendoza).
Jerónimo es un apasionado de la lectura desde pequeño (Foto: Jerónimo Mendoza).

“Nuestro propósito está en el futuro, pero queremos contribuir a un mejor presente en el que la tecnología y la ciencia nos empujen a un mañana próspero para todos los jóvenes de Argentina y América latina. Estamos orgullosos de Jerónimo, pero queremos contribuir a que no sea un caso aislado, sino que todos los jóvenes puedan desarrollar su potencial”, señaló Chris Meniw, CEO de Space Kids Foundation, en diálogo con TN.

“Space Kids es financiada por el sector privado. Nosotros queremos resolver problemas preexistentes, con la idea de proyectarnos a futuro en Argentina y la región. Por eso, para mejorar las condiciones de educación y de vida actuales y soñar con un futuro interplanetario, es fundamental el apoyo de las instituciones”, expresó Mauro Vicioso, cofundador de la ONG.

Respecto a si Jerónimo podrá cumplir su objetivo de viajar al espacio, Meniw expresó: “Claro que podrá suceder, el tema que para que ello ocurra debemos tener una base sólida en bioingeniería y habilidades técnicas. Darle a los jóvenes las oportunidades de involucrarse en proyectos relacionados con la industria espacial. Y debemos impulsar el desarrollo de programas que permitan a civiles participar en misiones espaciales”.

Suscribite
Notificarme de
guest
0 Comentario
Ver todos los comentarios