Stephen Wiltshire nació en Londres, en el Reino Unido y hoy tiene 50 años. Es hijo de padres caribeños y de niño no hablaba, no se relacionaba con otras personas, hasta que a los tres años lo diagnosticaron con autismo.
Cuando tenía cinco años, su familia y docentes descubrieron que su único pasatiempo era dibujar, y que esta era la manera en la que se comunicaba con los demás. Comenzó dibujando animales, autobuses y finalmente edificios. Hoy su obra es reconocida en todo el mundo porque puede dibujar en detalle una ciudad entera luego de haberla observado algunos minutos. Algunas de sus obras se encuentran en museos y colecciones privadas y públicas importantes.
A los siete años vendió su primera obra y a los ocho el Primer Ministro británico le encargo dibujar la Catedral de Salisbury.
Actualmente es uno de los artistas británicos más reconocidos en todo el mundo, sus contrataciones tienen lista de espera y su obra está plasmada en varias ciudades.
Es conocido por sus paisajes urbanos, perfectamente detallados y a exacta escala, en donde retrata las calles, los edificios, sitios icónicos, la vegetación y otros aspectos del lugar.
En su listado aparece la ciudad de Nueva York, México,Venecia, Sidney, Jerusalén y muchas más.
“Stephen es extremadamente humilde e imperturbable”, asegura Annette, su hermana y la encargada de administrar su galería en Londres. La fama no ha alterado su concentración ni lo ha puesto nervioso…Creo que impulsa aún más sus capacidades”, afirmó.
“El arte de Stephen habla un idioma que todos podemos comprender”, reflexionó Annette .