Hoy, 30 de abril, se celebra el Día Internacional del Jazz. En Optimism charlamos con Oscar Kreimer, uno de los máximos exponentes de la música argentina en ese género, y casi sin que se lo pidamos, Oscar nos regaló un monólogo que define perfecto a este estilo: “El jazz es la música más completa que existe dentro de todas las músicas, y es la que nos posibilita una expresión diferente, porque además de una melodía principal e interpretarla, nos permite improvisar o jugar sobre la armonia planteada. Es un género que no tiene límites, el jazz lo haces en cualquier ritmo y cualquier musica; es un concepto, una forma de jugar y divertirnos en grupo. Y eso es lo más lindo de la música”.
– ¿Cuáles son los artista que te movieron el piso?
Hay muchos referentes, no me alcanzaría el tiempo para nombrararlos, y seguro me olvidaría alguno. Pero en mis comienzos escuché mucho a Louis Armstrong, Glenn Miller, Artie Sahw, Benny Goodman, Charlie Parker, entre otros. En Argentina hubo grandiosos artistas como el Gato Barbieri o Piazzola que fueron quienes nos llevaron por el mundo. También pueden descubrir excelentes referentes en Francia y Brasil.
– ¿Cómo está actualmente la movida del jazz en Argentina?
Siempre hubo músicos que pelearon por crecer a nivel jazzístico en Argentina. El tema es que nunca fue fácil porque no hay una cantidad suficiente de público que siga este tipo de música como para que todos puedan vivir de esta música. Pero Luis Salinas, el Pampero Navarro, Giacobe o Ruben Rada de Uruguay, e infinidad de músicos pelean y peleamos por seguir las tradiciones del jazz y hacerlo crecer tanto de forma individual, como de forma grupal. Así y todo, en el último tiempo han cerrado muchos espacios donde se generaba esta música.
– ¿De ese y de qué otro modo afectó la pandemia la situación general, y la tuya particularmente?
Fue muy duro para todos eso de no poder exponernos a trabajar o relacionarnos con nuestros pares, la pasamos igual de mal que todos. Por otro lado, también posibilitó en forma individual profundizar nuestros instrumentos, y trabajar desde nuestro lugar teniendo tiempo para escuchar música, practicar y crecer. Sin dudas fue una forma de escape para poder enfrentar esta locura que se planteó a través de esta tremenda situación que vivimos por la pandemia.
– ¿Cómo ves la actualidad y el futuro de la música argentina?
La realidad del jazz argentino es una pelea constante por las limitaciones que tenemos en lo económico para comprar instrumentos, porque no tenemos referentes, porque no tenemos escuelas que nos puedan ayudar a crecer. Esto termina siendo un trabajo individual y es muy duro. Por otro lado, nos permite ser muy flexibles y abarcar diferentes estilos y formatos dentro de la música. El argentino se transforma en un músico hábil, y eso es muy diferente a lo que pasa en otros países donde son especialistas en el género, en cambio los músicos argentinos somos especialistas en todos los géneros.
– De a poco la música que tienen más antiguedad comienza a tener mixturas con otros géneros, ¿cómo es la relación del jazz con las nuevas tendencias?
El jazz se aplica en cualquier estilo, es un concepto más que una forma. Se aplica al candombe, a la chacarera, al tango, se puede aplicar a todo tipo de música y realmente genera situaciones musicales maravillosas porque la expresión de cada músico le permite explayarse y mostrarse tal cual es.
-¿Qué es lo próximo que se viene en tu carrera?
Estaré girando por varios lados, ahora el 4, 5, 6 y7 de mayo estaré por Corrientes, Chaco y Misiones. Están todos invitados a acercarse.
Gracias por la nota fuerte abrazo