Lisandro tiene 10 años, vive en Rawson y es arquero en Unión. Usa la 23 como su ídolo campeón mundial y confesó que su sueño es cuidar el arco xeneize.
Lisandro es un pequeño sanjuanino de 10 años que nació con una malformación en su pierna derecha por lo cual, desde los 9 meses usa prótesis. Y pese a su dificultad, y por el apoyo y aliento constante de su familia, el pequeño se transformó en un héroe de la vida.
Actualmente es arquero de Unión y es el jugador más admirado entre sus pares. Usa la camiseta 23 como el “Dibu” Martínez campeón mundial y confiesa que su sueño es jugar en Boca.
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El pequeño arquero del club Unión vive junto a su mamá, su hermano y su abuelo en la zona de Capitán Lazo, Rawson. Es el dueño de los tres palos en su categoría, usa la 23 en la espalda y lo apodaron el ‘Dibu’, por el arquero consagrado campeón mundial.
Nació de un embarazo congénito, que es una enfermedad o malformación que se presenta durante la gestación. Y según contó su mamá Jennifer a Tiempo de San Juan, “desde los 9 meses tiene prótesis”.
Y luego detalló: “Viajé a varias provincias hasta que alguien de Córdoba pudo decirme como tratar el tema de mi hijo. Un día tome la decisión e hice todo. Con ayuda y algunos emprendimientos para la estadía en Buenos Aires, me lo traje caminando y desde ahí no paré más. Viajo todos los años cuando se necesita hacerle la prótesis completa. Hay veces que la prótesis le queda chica (se la cambian cada 8 meses por su crecimiento) y hasta que consigo viajar y hago la colecta, él anda en la bici o silla de ruedas hasta que le llega la nueva. Es bastante cara, cuesta alrededor de 1 millón de pesos”.
Lleno de vitalidad y ganas de disfrutar la vida, así como se le presentó, “Licha” siempre quiso jugar al fútbol. Su mamá lo llevó al club azul un 12 de octubre y desde entonces siente la pasión y la transmite bajo los tres palos.
Según contó el protagonista de esta historia “mis compañeros me dicen que atajo muy bien y que me quieren para siempre en el equipo”.
“El club Unión me dio un oportunidad gigante de incluirlo. Él siempre acompañaba a su primo a los entrenamientos y lo hacía en bici o en la silla de ruedas. A ‘Licha’ siempre le gustó la pelota. Nunca le dije que no podía, siempre lo alenté que podía hacerlo, a su manera, pero que podía”, agregó Jennifer.
“Del club se mostraron muy interesados, hizo pruebas, quedó y hasta me dijeron que lo iban a becar. Unión es su segunda casa, nos hizo parte de la familia y de ahí no lo pienso mover”, aseguró la progenitora.
Como todo niño, Lisandro es inquieto, extrovertido, le gusta tener amigo y disfruta de su infancia. “Hay mucha gente que lo mira y admira por todo lo que puede hacer. Jugar con una prótesis es pesado, no es solo usarla. Se le vienen los bajones y hay que estar en su lugar”, confesó su mamá.
Mientras que Lisandro se dejó llevar por lo que quiere para su futuro: “Me gusta Unión y atajar, pero me encantaría estar en Boca”, cerró feliz el pequeño que usa la dorsal 23 como el ídolo de todos los niños, que fue revelación en la Copa América y se ganó la titularidad en la Selección Argentina que consiguió su tercera estrella en el Campeonato Mundial de Qatar 2022.
FUENTE: VIA PAIS