Ciro tiene 8 años, un día en el Paseo Sobremonte de la Ciudad de Córdoba se encontró con “Piru”, un perro que usaba un carrito para movilizarse. Un muy lindo momento para contar.
Los niños y niñas con los animales tienen un feeling especial. Y eso le sucedió a Ciro, un chico con discapacidad motriz, que estaba con su madre haciendo un picnic en Córdoba. Inesperadamente, se encontró con “Piru”, un perro que anda en carrito para moverse ya que tiene dañadas sus patas de atrás.
“¡Mamá, ese perro es cómo yo, mirá que bonito que es!“, exclamó Ciro. Inmediatamente se les acercó Lali la dueña provisoria de “Piru”, ya que se trata de uno de las mascotas que integra Discas Córdoba -organización encargada del rescate y cuidado de animales en estas condiciones- y que espera a ser adoptado. Ese día en la plaza quedó grabado en la memoria de Ciro, de su mamá, de Lali y por supuesto de Piru. Juntos se desafiaron a una carrerita alrededor de la fuente y jugaron lo que quedaba de la tarde.
Ciro y Piru, una dupla feliz
Ciro dijo que por su discapacidad motriz tuvo que realizarse varias operaciones que afortunadamente salieron bien. También contó que corre maratones con una bicicleta adaptada de la Fundación Jean Maggi, le gusta hacer Tik Tok, cantar, bailar y grabar videos. “Tengo muchos amigos, de la escuela y fuera de la escuela también. Cuando bajo de la silla se suben ellos y me llevan. Me cuidan y me quieren mucho“, afirmó.
Ciro nació con mielomeningocele e hidrocefalia. Una malformación del cierre del tubo neural. Es decir que nació con la médula espinal hacia fuera de su cuerpo en la región lumbar y eso le provocó una discapacidad motriz afectando desde la zona de la lesión hacia abajo. Por su parte, Piru es un perro con discapacidad que está en el hogar provisorio de la familia Rojas, que integra Lali, su papá y dos hermanos. Ellos le hicieron un Instagram donde comparten sus videos y muestran la fortaleza que tiene, más allá de su condición.
