Se asociaron con Lester Cargo Bike para desarrollar el rodado. Cómo se le ocurrió la idea a Esteban Brusa y todo los obstáculos que tuvo que vencer para emprender
Este emprendimiento, al igual que muchos otros arrancó con una idea. El sueño de un joven que había egresado del profesorado de Educación Física en Córdoba y se fue de viaje por la costa oeste de Estados Unidos.
Una vez que terminó los estudios, Esteban Brusa voló a Los Ángeles en el año 2012. Allí, durante el verano estadounidense se paseó por las doradas playas de California. Mientras tomaba alguna cerveza y veía a decenas de jóvenes cruzar las ramblas en patines o skate, vio algo que lo iluminó. La semilla de lo que luego sería su negocio.
Nace una idea
Cientos de gimnasios y personal trainers llegaban a los parques y hasta la playa misma para que sus alumnos tomaran las clases. Desembarcaban en la arena con banderas y trailers cargados de mancuernas, pesas y hasta colchonetas para realizar los estiramientos del final. “Yo esto lo tengo que hacer en Argentina”, se dijo un Brusa aún muy joven y con mucho camino por recorrer.
Esteban siguió su camino, volvió a Córdoba y arrancó a trabajar como profesor de Educación Física. Hasta que en el año 2019, llegó el momento de darle forma a aquella idea que había nacido en las arenas californianas.
El joven se juntó con el ingeniero Mauricio Chiaraviglio y arrancaron a moldear los primeros modelos. También sumaron como socio al padre de Esteban. “Yo se los dibujaba en papel y él después le daba la forma y me lo bajaba a la tierra con sus conocimientos de ingeniería”, recuerda Esteban.
Los primeros modelos fueron los trailers para llevar enganchados en un auto o camioneta. También le dieron un nombre a la empresa Móvil Fitness. Así, arrancaba el emprendimiento tras el sueño de Esteban.
Entonces, tras los primeros modelos llegó la pandemia de coronavirus y todo se detuvo. “El rubro de los gimnasios fue de los que más sufrieron la cuarentena –recuerda Brusa-. Fueron momentos muy difíciles, pero nunca pensé en frenar este proyecto. Sabía que iba a ser un éxito”.
Esteban se tomó todo el tiempo libre que le daba la cuarentena y el cierre de sus fuentes de trabajo, para cranear nuevos productos. “Sabía que tenía una buena idea y que éramos de los primeros en hacerlo en Argentina – resalta Brusa-. Eso nos daba un plus que debíamos aprovechar. Me pasé todo ese tiempo trabajando y esperando el fin de las restricciones para volver a las pistas”.
El tiempo pasó, llegaron las vacunas contra el covid-19 y se minimizaron las restricciones. Lo primero que se abrió fueron las actividades al aire libre. Los parques de las ciudades argentinas se llenaban todos los fines de semana. La gente usaba barbijo, pero se lo quitaba para tomar un café en una vereda o un trago comprado en un bar. Fueron los tiempos del take away.
A continuación los personal trainers y gimnasios empezaron a usar los parques para sus clases. Llevaban las mancuernas, los parlantes y hasta algún banner para marcar presencia. Cada sábado, se colmaban las plazas. Era el mercado ideal para los productos de Móvil Fitness. En ese contexto, y cuarentena mediante, la empresa ya tenía un nuevo producto en gateras.
Se asociaron con una fábrica rosarina, Lester Cargo Bikes, y crearon la primera bicicleta con gimnasio incorporado para que el profe llegue al parque equipado para las clases. “Con la salida de la cuarentena se creó un nuevo mercado que es la de hacer actividad física al aire libre. Sacar las clases de los locales y llevarla a las plazas o frente al río –explica Brusa-. Creo que lo que hizo el coronavirus en realidad es acelerar un proceso que ya se iba a dar y ahora ya se afianzó”.
Se trata de la primera bicicleta en el mundo creada para este propósito. Otra vez, Brusa se puso a dibujar en un papel todas las partes de cómo sería el modelo. Luego lo agarró Charaviglio y lo concretó con las medidas acordes para que funcione. Esta vez, además, participó Lester para que la bici tenga la capacidad necesaria para poder llevar el peso.
En la parte de carga del rodado, el profe podrá llevar mancuernas, pesas, discos, barras y colchonetas. Móvil Fitness ofrece un modelo a pedal tradicional y otro con bici eléctrica. “Están preparadas para distancias cortas – aclara Esteban-. Pero es una forma de llegar hasta el parque que pueden ser unas 5 o 6 kilómetros”.
Salir al mundo
Con los productos ya instalados en Argentina, los emprendedores lo empezaron a ofrecer en otras partes del mundo. “En el país tenemos tres personas que los arman – relata Esteban, sobre el proceso-. Logramos automatizar el desarrollo de las piezas, lo que facilita mucho el montaje posterior”.
Entonces, llegó la propuesta de llevar los modelos a Sevilla, España. Brusa y sus socios hicieron números y finalmente se decidieron por fabricar y montar directamente los productos en Europa con la misma marca que los de Argentina.
“Los costos del país y el valor del dólar oficial hizo que no nos cerraran las cuentas para exportar – admite Esteban-. Una lástima porque hubiera sido un muy buen generador de divisas para Argentina”.
Así, Móvil Fitness se asoció con un fabricante de grúas en Sevilla. Allí, montará los trailers y la bici gimnasio para comercializar en España. “El plan a futuro es expandirse por el resto de Europa”, se entusiasma Brusa.
Sobre lo que se viene, Esteban evalúa que el cambio que forzó la cuarentena por la pandemia de coronavirus llegó para quedarse. “Mi idea es que todos los gimnasios puedan ofrecer delivery de clases de diferentes disciplinas y llevarla a las plazas o parques de todas las ciudades”, resalta Brusa. De esa manera, los trailers y la bici de su emprendimiento serían casi indispensables.
FUENTE: INFOBAE