Con apenas seis años y un corazón gigante, el pequeño Harry Byrne, de Salisbury, una localidad de Inglaterra, decidió impulsar una colecta para llevar dinero a dos casas de asistencia que se ocupan de cuidar a su pequeño hermano Reuben, de un año. Reuben sufre de una condición que limita su vida: un daño cerebral que es tan raro que no tiene nombre , y solo 16 personas en el mundo se cree que lo tienen. Ocho años atrás, los padres Sean y Sophie habían perdido una hija por la misma condición.
Harry asumió el desafío de recaudar dinero para el hospicio de niños de Julia’s House, en Wiltshire, y para Naomi House y Jacksplace, en Wiltshire. “Harry ha experimentado de primera mano como estas maravillosas organizaciones benéficas ayudan y cuidan a su hermano, Reuben, y nos apoyan como familia“, escribieron los padres Sean y Sophie en la página Virgin Giving , según reporta Daily Mail. En principio, el valiente Harry había planeado caminar las 45 millas entre los dos hospicios, pero tuvo que cambiar la ruta debido al bloqueo que impuso el gobierno británico por la pandemia de coronavirus. Entonces, lo que hizo fue quedarse en su localidad y caminar 24 kilómetros por día, con su familia apoyándolo en el camino. Su padre Sean se unió a él para el desafío completo, mientras que su madre Sophie y su hermano pequeño Reuben participaron donde pudieron. Según Daily Mail, Harry originalmente había querido nadar con tiburones para recaudar dinero, pero decidieron el desafío de la caminata por las restricciones para trasladarse que impusieron por el rebrote de Covid 19.
Sophie, la madre, le dijo a al periódico The Salisbury Journal : “El desafío fue idea de Harry: me dijo que quería recaudar dinero para las organizaciones benéficas que cuidan a su pobre hermano. Ha estado saltando de alegría por el apoyo que ha tenido hasta ahora y no puede esperar”.
“Caminar 45 millas (72 kilómetros) es una gran distancia para un niño de seis años, pero Harry tiene una resistencia increíble y le encanta estar al aire libre“, dicen sus padres. Harry originalmente había querido nadar con tiburones para recaudar dinero, pero el bloqueo significó que decidieron el desafío de la caminata. El objetivo original de la familia era recaudar 1.500 libras, pero el pequeño Harry superó con creces el desafío, y que la colecta alcanzó las 8.456 libras. Reuben puede tener hasta 10 convulsiones al día cuando deja de respirar, por lo que la atención en los hospicios es imprescindible para su cuidado. Y la familia, con Harry como ideólogo, buscó devolver un poco del amor que le dan cada día a Reuben.