Lleno de sueños, pero a su vez de deudas, Joel Mistokles le puso la cara a la adversidad en busca de cumplir su sueño de ser médico. Por eso, cantaba en los buses para poder pagar su carrera universitaria.
En la mañana del pasado 18 de octubre, este esfuerzo tuvo sus réditos y Joel, de 33 años, se graduó de Medicina con honores. Este logro llegó tras siete años de lucha, ya que no solo era pagar su carrera universitaria, sino también mantener a sus esposa e hijos en San Luis, Brasil . “Siempre tuve el sueño de ser médico y luché por ese sueño con la herramienta que tengo, que es la música. Nunca fue fácil. Mi esposa y yo siempre tuvimos dificultades, teníamos que cuidar a nuestro hijo, pero no me rendí”, declaró Joel.
Su historia
Todos los días se levantaba a las cuatro de la madrugada, junto a sus esposa, para preparar cuscús de arroz, pasteles de maíz u otros platillos para venderlos en la facultad de Medicina. Además de la venta de platos típicos brasileños, Joel se montaba a los buses para cantar con sentimiento y “pensando que estaba en su habitación” entonaba canciones que motivaran a los usuarios del transporte público a que compraran sus discos o le dieran algunas monedas.
“Hubo un día en que estaba triste porque faltaban cosas en casa. Luego estaba en un autobús y comencé a cantar como si estuviera en mi habitación. Las lágrimas se me llenaron la cara, canté como si estuviera cantando a la mía. Cuando pasé por el torniquete, noté que algunas personas lloraban dentro del autobús”, agregó Joel. No obstante, el canto no solo era reservado para los buenos, puesto que este hombre llevaba su música a hospitales para cantar sobre “el amor al prójimo” y motivar a los más desfavorecidos.
Hubo un momento, en 2016, que también participó en un concurso de televisión para ayudar a su esposa, Lorrane Pereira, a pagar sus implementos de su carrera universitaria en odontología. Al final, ganó la competencia. Tras siete años, Joel se graduó de médico y a la ceremonia asistieron familiares, amigos y profesores, quienes siguieron las batallas que libró Joel durante la carrera.
Lo que viene
Tras cumplir su sueño, Joel quiere ayudar a la persona que más lo ayudó durante todo este trayecto: su esposa, pues ella es odontóloga, pero con el nacimiento de su segunda hija se quedó en casa cuidando del hogar. “Ella se centró en cuidar a nuestra hija y no trabajó. Ahora, como médico, espero que pueda ejercer aún más excelencia en el trabajo que eligió, que es ser dentista“, expresó Joel. Espera que pueda ejercer su profesión para 2022, pero por el momento, aspira a aprender más cosas para estar lo más preparado y dar lo mejor a sus pacientes.