POR FERNANDA DI BENEDETTO
La ballena franca austral es una especie de cetáceo que habita las costas del hemisferio sur. Mayormente, se las encuentra recorriendo una amplia franja que va de los 20° a los 60° de latitud en los océanos Pacífico sur, Atlántico sur e Índico sur, reuniéndose en Argentina (península Valdés), Australia, Chile, Uruguay, Tristán de Acuña (dependencia británica de ultramar), y Nueva Zelanda.
Son una especie en peligro de extinción debido al ejercicio de la caza ilegal. Se calcula que actualmente hay unos 8000 ejemplares y, al tener cría una vez cada tres años, se dificulta su reproducción. Es por esto que cada vez que migran y se reúnen cerca de la orilla del mar, es un espectáculo hermoso y digno de apreciar.
En Argentina, más precisamente en la Península Valdés al este de la provincia del Chubut, se da este fenómeno cada año entre el mes de mayo y diciembre, siendo septiembre y octubre los mejores momentos para verlas. A este suceso se lo conoce como Temporada de Ballenas, y se celebra mayormente en Puerto Madryn atrayendo a un sinfín de turistas de todo el mundo. Durante este período, las ballenas se aparean, tienen a sus crías y las alimentan hasta que están listas para partir hacia un nuevo destino.
Desde playas como El Doradillo, ubicada en Puerto Madryn, pueden observarse a tan solo metros de la orilla, mientras que en otros puntos de la Península pueden realizarse avistajes embarcados. Por ser un espectáculo natural al alcance de todos los espectadores y por el nivel de exposición de las ballenas, el 28 de septiembre de 1984 se sancionó la ley n.º 23094 que declaró monumento natural a todas las ballenas francas que se visualicen en aguas jurisdiccionales de Argentina. La necesidad de proteger a estos ejemplares para evitar la propagación de su extinción, viene postulando el debate que busca conducir a la creación de un santuario que se ubique en el Atlántico Sur y cumpla esta función.
Mientras tanto, existen activistas que aportan su granito para la conservación del hábitat, como por ejemplo el grupo Salvando la Patagonia. También, existen fotógrafos profesionales que cada año retratan esta aventura, inmortalizando en sus perfiles a esta maravillosa especie. Algunos de ellos son Maxi Jonas, Alejandro Carribero, Darow, entre otros.
Actualmente, se desarrollan proyectos en pos de un mayor entendimiento del desempeño de la ballena franca austral en las costas patagónicas, como por ejemplo el proyecto “Condición corporal de ballenas francas australes en Península Valdés y su relación con la mortalidad de crías”, llevado a cabo por científicos de Argentina, Dinamarcay Estados Unidos, cuyo principal objetivo es establecer la condición corporal de las ballenas francas que utilizan las aguas patagónicas de Chubut como área de cría y reproducción.
Además, la ballena franca inspiró una serie de producciones, tanto audiovisuales como gráficas, siendo el cortometraje La Ballena Franca y el cuento infantil Malena Ballena de los más relevantes. Además, también inspiró su impresión en el billete de $200 en el 2016, y su historia se encuentra en una gran variedad de museos tanto nacionales como internacionales.
Sin dudas, la ballena franca austral es de las especies más inspiradoras de todo el mundo, y, debido a su accesibilidad, se pueden apreciar de maneras inimaginables tal y como muestran los fotógrafos y fotógrafas, así como también las miles de capturas de turistas.
