Los camellos atraviesan el desierto con un cargamento de libros a sus lomos para llegar a los pueblos más escondidos y que los niños no pierdan el ritmo de la escuela. Para ello, avanza a través del terreno desértico de la región paquistaní de Baluchistán. Sus anchas patas se hunden en la arena caliente a cada paso pero ien vale el esfuerzo, ya que el destino de Roshan es transportar en su lomos los libros de pueblo en pueblo para que decenas de niños que lo esperan vestidos con sus mejores galas de domingo, puedan leer.
Los pequeños corren y se apresuran a recibir a Roshan con su cargamento de libros. Por unas horas se convierte en la biblioteca del pueblo donde todos los niños pueden elegir un libro de los que lleva en sus lomos y después devolverlo. La biblioteca está abierta desde las tres de la tarde hasta las seis. Después Roshán llevará los libros a cuatro pueblos más diferentes del distrito de Kach, en Pakistán.
La pandemia por coronavirus obligó a cerrar las escuelas y universidades de Pakistán en marzo de 2020 y más de 50 millones de estudiantes se tuvieron que quedar en casa. Fue la directora de un centro escolar la que decidió fundar este proyecto de la biblioteca camello para que los niños de los pueblos más remotos puedan seguir aprendiendo y leyendo hasta que puedan volver a la escuela.