Julián Cabrera estudia en el Politécnico de Rosario. Recientemente, ganó una medalla de plata en la Olimpíada Internacional de Matemática que se disputó en Noruega.
A esta altura, Julián Máximo Cabrera ya casi no tiene espacio en el mueble del comedor de su casa donde guarda sus premios y diplomas. Sin embargo, este fin de semana debió hacer lugar para colocar la medalla de plata que se trajo de la Olimpíada Internacional de Matemática (IMO), una especie de mundial de matemática del que participan estudiantes secundarios de todo el planeta. Es que el joven rosarino de 18 años volvió a destacarse nuevamente en un certamen internacional en esta disciplina que lo apasiona desde chico. Julián integró la selección argentina, que cosechó en total cuatro medallas y dos menciones de honor.
En pocos días Julián cumplirá 19 años y siente este nuevo premio como un festejo anticipado. Sobre todo porque sabía desde antes de viajar que, al estar ya en sexto en el Politécnico —escuela secundaria dependiente de la Universidad Nacional de Rosario (UNR)— esta era la última chance que tenía para ir a una Olimpíada de este tipo. El 2023 comenzará una carrera universitaria y si bien aún tiene tiempo para definirlo, dice que seguramente cursará ciencias de la computación, que se estudia en la Facultad de Ingeniería de la UNR.
“Estoy muy contento, sobre todo porque al ser mi última vez pude viajar y conocer otra ciudad y otras personas de distintos países”, dice Julián a La Capital, a pocas horas de haber pisado suelo rosarino. El año pasado el joven rosarino también ganó una medalla similar en la olimpíada organizada por San Petersburgo (Rusia). La IMO se celebra todos los años en forma ininterrumpida desde 1959, a excepción de 1980. Aunque a causa de la pandemia, en 2020 y 2021 se desarrolló de manera virtual.
Pero este año volvió a ser presencial y Julián, junto a otros cinco estudiantes de la Argentina, partió el 8 de julio pasado con destino a Oslo, para participar junto a casi 600 adolescentes de 104 países de la 63º Olimpíada Internacional de Matemática, que se realizó del 6 al 16 de julio en la capital noruega. La competencia en sí se desplegó durante los días lunes 11 y martes 12 de este mes: en cada uno de ellos, los chicos debieron resolver tres ejercicios en un lapso de 4 horas y 30 minutos. Además de competir, pudieron disfrutar de la experiencia de convivir con chicos y chicas de otras geografías y visitar sitios de interés. Julián hasta se dio el lujo de tocar el piano ubicado en el Ayuntamiento de Oslo.
Cosecha nacional
Además de Cabrera, el equipo argentino —integrado por seis adolescentes— se trajo tres medallas de bronce de la mano de Nicolás Ricci (Campana, Buenos Aires), Bruno Ziger (Ciudad de Buenos Aires) y Felipe Klir (Ciudad de Buenos Aires). En tanto que Uriel Digestani (Ciudad de Buenos Aires) y Martín Lupin (Mar del Plata) obtuvieron menciones de honor. Desde el Politécnico celebraron el resultado obtenido por los chicos argentinos y destacaron que esta participación refleja “la pasión, ingenio y compromiso de los estudiantes por la matemática y el compromiso del acompañamiento docente”.
Un joven talento
Para Julián el vínculo con las matemáticas se da casi de forma natural desde su infancia. Alguna vez contó que cuando tenía unos seis o siete años ya había aprendido la fórmula resolvente y que esa apertura precoz a nuevos conocimientos lo impulsaron a querer saber más.
No es la primera vez que Julián Cabrera es noticia en las páginas de La Capital por sus logros en este tipo de competiciones. Es que el joven estudiante del Poli cuenta con una larga trayectoria en olimpíadas tanto nacionales como internacionales. Sin ir más lejos, el año pasado obtuvo medalla de plata en la internacional de Rusia y oro perfecto en la iberoamericana de Costa Rica. Desde este fin de semana cuenta con una nueva medalla. La última de su etapa como secundario.
FUENTE: BILLIKEN