Ha hecho campañas para ayudar a niños e incluso creó un banco de medicamentos. Varias figuras reconocidas a nivel nacional se enteraron de él y decidieron aportar su granito de arena.
Desde su adolescencia se sintió motivado a ayudar a las personas y con el tiempo su causa se volvió bandera de cada vecino de Mercedes, Corrientes. Hoy todos conocen a Santiago Agustín Pauli cuando visita los barrios o habla en un evento, ya que dio su mano solidaria a aquel que lo necesitó, y pretende seguir haciéndolo.
El correntino -a pesar de su corta edad- basó sus últimos años no solo en estudiar veterinaria, sino también en armar campañas para quienes necesitaban de su ayuda. Las mismas fueron destinadas para la localidad correntina donde vive, pero gente de toda la provincia ha aportado.
Pauli, de 23 años, contó que incluso han llegado a colaborar personalidades famosas oriundas de Corrientes, como Flavio Mendoza, Virginia Gallardo, el influencer Wally Iturriaga y la modelo Virginia Acosta. Debido a las redes sociales, su iniciativa fue creciendo cada vez más.
“Al comienzo lo hacía solo, pero luego con la difusión muchas personas fueron dando una mano. Ahora tenemos un grupo de WhatsApp donde hay 90 miembros, somos un gran equipo que salimos a trabajar, recorremos los barrios y nos mantenemos al tanto de las necesidades de la gente”, comentó.
Uno de los primeros trabajos solidarios que hizo fue conseguirle una silla de ruedas a Ramiro, el niño de 6 años que -cuando su caso llegó al mercedeño- contaba con un grave cuadro de desnutrición. El menor necesitaba la silla debido a un problema que tiene en la médula espinal y complica su desarrollo.
“Cuando le consulté a su madre qué hacía la clase política, contestó que nadie la atendía, pues según ella su hijo no les servía como voto”, recordó Santiago. Por esto, y gracias a sus contactos, el muchacho se comunicó con el Gobernador y lograron ayudar al pequeño, mejorando su calidad de vida.
La enfermedad de huesos de cristal es muy rara y demanda un entorno apto para que la persona que la tiene se pueda desenvolver. Es por esto que cuando el correntino se enteró de que una niña de la región sufría este trastorno, no dudó en volver a hablar con Gustavo Valdés y así conseguirle una casa en condiciones.
También ha logrado juntar dinero para una operación de desprendimiento de retina. “Siempre me gustó ayudar y me veo en esa persona que necesita, porque si el día de mañana yo necesito algo y no me dan una mano, me haría muy mal”, expresó.
Una tarde, mientras tomaba unos mates, Santiago se preguntó cómo podría ayudar a la gente a ahorrar un poco, teniendo en cuenta el contexto de inflación que vive el país. Instantáneamente, pensó en los medicamentos, insumos de gran importancia, pero con un elevado costo que los hace casi inaccesibles para algunos.
En este sentido, explicó lo que hizo: “Le consulté a un amigo y me comentó que a veces las obras sociales les dan medicamentos de más a sus afiliados, entonces pensé en pedirle a aquellos que les sobran para dárselos a quienes lo necesitan y no tienen una cobertura médica”.
De esta manera, creó un banco de medicamentos solidario y recaudó $5.000.000 en remedios a valor de farmacia. Todos los días se van dando fármacos a la gente humilde que los necesita, y que le sobran a otros.
Son varios los mercedeños que han colaborado en esta causa, y para el Día del niño los vecinos Víctor Rey y Jessica Prada no se quedaron atrás. El domingo 14 se realizó un festejo en el Hípico Santa María, el campo de este matrimonio. Allí es donde viven y tienen su escuela de equitación.
Esta familia hace años que brinda su mano a quienes lo necesitan y se han abocado enteramente a su pueblo. El refrán “uno cosecha lo que siembra” los representa a la perfección, pues cuando los incendios invadieron la provincia a principios del 2022 y su terreno se vio afectado, gente incluso de todo el país acudió a su ayuda.
Llenos de agradecimiento, siguieron brindando su mano solidaria y esta vez lo hicieron para los nenes de Mercedes que están en situación de calle. “Recaudamos dinero para 160 niños que no tienen hogar. Compramos alimentos, planeamos actividades, juegos, alquilamos un pelotero, contratamos un payaso y malabaristas”, aseguró Santiago. El Gobierno municipal colaboró con las sillas y el colectivo para trasladarlos a la chacra. Entre tanto, a nivel provincial aportaron las pelotas y camisetas que los chicos utilizaron.
Jessica y Víctor, como buenos anfitriones, prestaron el hípico durante aquella tarde y le regalaron un gran evento a los pequeños. Aprovechando que enseñan equitación y cuentan con entre 20 y 25 caballos, algunos niños incluso pudieron vivir la experiencia de montar.
“También largamos una rifa para destinar fondos a merenderos que alimentan a chicos que viven en la calle. Uno de ellos nos solicitó una computadora y una impresora para conseguir materiales de estudio y enseñarle a leer a los niños. Nos ponen contentos ver gente que piensa como nosotros, ver que le dan de comer a niños”, señaló Pauli.
Víctor y Jessica son dos de los tantos ciudadanos que lo acompañan en esta lucha solidaria por mejorar la calidad de vida de todos los mercedeños que lo requieren. Por donde se lo vea, ya sea en un evento o visitando un barrio, la gente conoce a Santiago y sabe que puede acudir a él.
FUENTE: VIA PAIS