Esas son los ejes de vida que eligió este joven al momento de recorrer el país y llegar al extremo sur de Argentina. Su historia es sorprendente y nos muestra que existen formas de vida diferentes a las que conocemos.
Martín Massiti es fotógrafo, tiene 26 años y con su sed de conocer el mundo decidió transformar su Citröen C3. Las ganas de viajar fueron su combustible siempre, pero un hecho fue lo que lo impulsó a transformar su auto en su casa. Fue cuando vio frustrado su plan de ir a Europa por la pandemia. Hoy lleva 98 días en ruta y planea extenderlo por 2 meses más. Convirtió a su Citröen C3 en su casa rodante, y desde allí recorre todo el sur argentino. Lo que alguna vez estuvo en el plano de los proyectos, como sueño o deseo, se hizo realidad. Ya lleva casi 100 días de ruta, cada uno con su aventura y nueva experiencia.
Este joven emprendedor decidió convertir su auto en su casa, y cambiar los recorridos preestablecidos. Ya no utilizaría el vehículo para ir de su casa al trabajo, o de su casa a juntadas con amigos, sino para viajar por todo el país. Sin embargo, los preparativos y modificaciones que le realizó al auto fueron muchos. Y para eso, contó con la ayuda de su abuelo con quien trabajó codo a codo durante 2 meses. El Citroën fue montado con una estructura de caño y madera. Además, le sumaron una mesita para la computadora y para comer.
Hace casi 100 días que Martín salió de su casa. En realidad, hace 9 mil kilómetros que se encuentra viviendo su propia aventura. Como fotógrafo profesional, encontró en las redes una forma de compartir su recorrido con desconocidos y animarlos a seguir su camino. Además, utiliza estos medios para mantenerse en contacto con su familia. Así, tiene la posibilidad de dejar plasmado en postales únicas cada lugar que va visitando.
