María Blanca Irigoyen es protagonista de una historia de perseverancia y amor. Conoció a Francisco, con quien se casó y se fueron a vivir a España. Hoy, es alcaldesa de Barcenilla, un pueblo español.
María Blanca Irigoyen es oriunda de Curuzú Cuatiá y este domingo fue elegida para la Jefatura de Barcenilla de Piélagos, en la provincia de Cantabria, España. La correntina contó cómo es vivir lejos de su familia y su provincia natal, su historia de amor, sumudanza al país europeo y cómo incursionó en la política.
María Blanca se mudó a España hace 20 años, con su pareja, Francisco Javier Arroyo Cerro. Ella era maestra especial y él, profesor de educación física: se enamoraron y decidieron dejar el país luego de la crisis del 2001. Allí, ella homologó su título y hasta estudió otra carrera, graduándose en pedagogía terapéutica y se especializó en trastorno del espectro autista.
Ahora viven en Barcenilla, un pequeño poblado en Piélagos, Cantabria, con su hijo Javier, de 12 años. Si bien disfruta su vida europea, asegura que extraña su provincia natal: “Extraño a montones a Curuzú; a la gente, la familia, las juntadas, el asado. A pesar de la distancia, sigo muy unida a Corrientes, a Curuzú, sigo manteniendo los lazos con mis amistades y mi familia que son muy fuertes”.
LA CORRENTINA QUE FUE ELECTA ALCALDESA EN UN PUEBLO DE ESPAÑA
La curuzucuateña se involucró en actividades religiosas en Barcenilla de Piélagos, el pequeño pueblo donde se instaló para vivir con su familia. Asiste mucho a misa e incluso trabajó como catequista. Así fue como la invitaron al Partido Popular, para que se postulara como alcaldesa.
“Es una fuerza que cree mucho en la familia, en la Iglesia Católica, todas esas costumbres que se van perdiendo. Acá vamos a la misa y somos cuatro los que vamos, la gente joven no, son todos gente mayor la que va a misa porque no cree o no sigue esas costumbres”, explicó la correntina a La otra campana, sobre el Partido Popular.
La nueva alcaldesa contó que ella no tenía pensado dedicarse a esto: “No quería meterme en política. El actual alcalde Pedáneo me ofreció hace un tiempo y me negué; y al final, entre tantas conversaciones con Carlos Caramés –líder del Partido Popular– me convencieron”.
“Me siento feliz porque el pueblo me ha elegido siendo yo extranjera”, expresó. Ella es muy conocida en el lugar por sus labores con la Iglesia, es la representante ante el Obispado, elegida por el Cura; y además, trabaja como catequista y está muy involucrada con la religión.