Rafael Maratea, padre de Santiago, compartió una carta en Instagram contando cómo nació el espíritu caritativo del influencer.
Gracias a la exitosa campaña solidaria en la que recaudó más de 180 millones de pesos para combatir los incendios en la provincia de Corrientes, Santiago Maratea volvió a estar en boca de todos. Desde el año pasado, el joven influencer se vale de su enorme visibilidad en Instagram, donde lo siguen 3,3 millones de usuarios, para ayudar a los demás.
Y aunque él aclara: “No es caridad lo que hago”, a lo largo de los últimos meses desarrolló una admirable capacidad de iniciativa para organizar donaciones en pos de causas sociales.
Primero fue Emmita, una beba que padece atrofia muscular espinal y necesitaba comprar el medicamento “más caro del mundo”. El instagramer llegó a recaudar el dinero correspondiente (2.000.000 de dólares) para el remedio de Emmita en menos de dos semanas. Y desde entonces no paró.
Luego vinieron las campañas para ayudar a la comunidad wichi con la compra de dos camionetas, y la misión chaqueña para llevar donaciones de ropa y alimentos; la compra de la sede de Constitución para las Madres de Víctimas de Trata y la colecta para recuperar un refugio incendiado que rescata animales de la calle en Adrogué, entre muchas otras más.
Cómo comenzó todo
Sin embargo, en una reciente publicación que hizo en su cuenta de Instagram, el papá del joven influyente sorprendió a todos sus seguidores al contar cómo nació el espíritu solidario de su hijo. En detalle, Rafael Maratea reveló a través de una carta que cuando Santi tenía 13 años sus calificaciones en la escuela eran tan malas que él y su esposa decidieron que no iría a un viaje que incluía una gira deportiva.
Por ese motivo, el por entonces adolescente sorprendió a sus progenitores con un inesperado gesto: le regaló la plata que había ahorrado para dicha travesía a sus compañeros. Además, siempre de acuerdo a las palabras de Rafael, años más tarde Santiago invitó a muchos kiosqueros a que le regalen alfajores para poder entregárselos a la gente.
Además de solidario, Santi era un comunicador nato desde temprana edad. Es que por aquella época comenzó a registrar sus iniciativas para subirlas a su canal de YouTube con el objetivo de hacer crecer su caudal de impacto en las redes.
Con esa movida solidaria a Maratea hijo le fue tan bien que llegó a regalar zapatos y hasta efectivo a personas que se cruzaba en la vía pública.
En tanto, cuando su popularidad ya era descomunal, y muchas marcas le ofrecían canjes a cambio de publicidades, él les proponía recibir dos productos en vez de uno para regalar uno de ellos entre sus seguidores.