Fue reconocido por su trayectoria en la entrega de los Wine Enthusiast Wine Star Awards con el galardón “Lifetime Achievement”.
Es, literalmente, el logro de toda una vida de trabajo dedicada al vino. Ese es el significado del premio “Lifetime achievement” recibido este lunes a la noche en Miami por el empresario argentino vitivinícola Nicolás Catena Zapata en la ceremonia de entrega de los Wine Enthusiast Wine Star Awards. Es la primera vez que un sudamericano es distinguido con este reconocimiento.
Los galardones, que van por su edición N° 22, reconocen tanto a individuos como a compañías que se destacan en la industria internacional. Son organizados anualmente por la revista norteamericana Wine Enthusiast, fundada en 1979. Todo el staff de la publicación, incluyendo equipo editorial, ventas y marketing participa de la votación.
En el caso de Catena, entre las razones por las que fue elegido estuvo el considerarlo un “visionario”, por haberse propuesto producir vinos de clase mundial hace más de cuarenta años, cuando el Malbec aún no era una insignia argentina en el mercado internacional.
Su historia
Nicolás Catena es economista. En la década del 80 vivió un tiempo en California, donde se desempeñó como profesor invitado en la Universidad de Berkeley. Para entonces, ya tenía en Mendoza la bodega familiar, que producía un vino muy diferente al que probó en Napa Valley. Inspirado por los jóvenes enólogos californianos, regresó al país con la convicción de modernizar sus viñedos. Invirtió en equipamiento técnico e investigación de los microclimas, también fue pionero en impulsar la viticultura de altura, que le permitió lograr perfiles de vinos excepcionales.
“A los 82 años, está ampliamente considerado ‘el padrino’ del vino moderno argentino“, afirma el artículo de Wine Enthusiast, que también agrega: “El Malbec ahora es casi sinónimo de vino argentino, mientras que varios de los mejores vinos de Bodega Catena Zapata, incluido el Malbec Argentino y un blend de Malbec-Cabernet Sauvignon que lleva el nombre del visionario Nicolás Catena, y son elogiados universalmente”.
Al recibir el premio, Catena expresó: “Me siento profundamente honrado. Al venir de una familia de inmigrantes, pienso en mi abuelo, que viajó desde Le Marche, Italia, a Argentina con tan solo 17 años, solo y enfrentando un futuro incierto. Tres años después plantó su primer viñedo de Malbec a orillas del río Tunuyán, en Mendoza. Sé que él estaría hoy muy orgulloso de nuestra familia”.