Hülya Marquardt tiene 37 años, vive en Stuttgart, Alemania junto a su marido Dennis. A los 18 perdió ambas piernas. “Me veo diferente, pero nunca me he sentido diferente”, afirma.
Hülya nació con una malformación en manos y piernas y a los 18 a raíz de una sepsis sufrió una doble amputación de sus miembros inferiores. En su cuenta de Instagram @huelya_dennis comparte los detalles de su vida cotidiana, y la manera en la que se moviliza, ya sea con silla de ruedas, con unas prótesis o en una patineta. Las fotos y videos que comparte, son realmente inspiradores y demuestran que pese a tener una discapacidad, eso no le impide realizar las tareas de toda mamá y mucho más.
“Hay algunas cosas con las que necesito ayuda y uso una silla de ruedas para moverme, pero a menudo simplemente gateo o uso una patineta o un carrito pequeño, ya que es más conveniente. Tener una silla grande y pesada conmigo e intentar entrar y salir del automóvil puede ser difícil y algunos lugares, como las tiendas tienen escalones frente a ellos, así que me levanto de la silla para caminar con las manos y los muñones”, describió en una entrevista.
A través de su cuenta de Instagram intenta demostrar que puede hacer lo mismo que otras personas y en el último año muestra cómo se maneja con su bebé de casi un año. “Al principio daba miedo, pero ahora puedo manejarlo bastante bien”, dijo al mismo medio inglés, sobre su maternidad. Doy el pecho a tiempo completo, cambio los pañales. Básicamente hago todo lo que una madre con extremidades hace, sólo que de una manera diferente”, destaca.
Hüelya es dueña de una boutique de moda, donde para promocionar la ropa también oficia de modelo porque considera que “es necesario que haya más personas con discapacidad en las redes sociales, en la televisión y entre el público”. La idea de compartir los detalles de su vida en Instagram, surgió de un viaje con su marido. Según contó estaban en una playa y decidieron tomarse fotografías para demostrar que Hüelya podía viajar, vestirse con estilo y sentirse atractiva. “A veces, las personas con discapacidad tienen más discapacidad por el miedo a que otras personas los miren, que por su propia discapacidad. Yo aprendí a superar eso gracias a mi esposo”, destacó. “Sé que me veo diferente y hago las cosas de manera diferente a la mayoría de las personas, pero nunca me he sentido diferente”, expresó.
La mujer, que cuenta con millones de seguidores en Instagram asegura que después de perder ambas piernas decidió mirar hacia adelante, estudiar y mantener una actitud positiva. Consiguió un trabajo de tiempo completo, obtuvo un piso, un auto y decidió que quería formar una familia. En 2015 conoció a Dennis, su marido con quien se casó en 2018 y en 2020 se convirtieron en padres de un varón. “Ahora soy madre, esposa, dueña de una boutique de moda y tengo un trabajo de tiempo completo”, dijo orgullosa. “Cuando tenía 18 años, los médicos creían que estaría en un hogar de ancianos toda mi vida. Creo que todo lo que he logrado fue posible porque siempre creí que podría serlo“, confesó.
